El líder ruso advirtió que castigaría la “traición” del que fuera considerado como uno de los miembros de su círculo más cercano.
El presunto deceso del fundador del temible grupo de mercenarios Wagner ocurrió en un “accidente aéreo” registrado este miércoles al noreste de Moscú, según han informado las autoridades rusas.
Las causas del siniestro aún no han sido aclaradas. Sin embargo, el hecho de que el suceso se produjera justo dos meses después de que Prigozhin protagonizara el desafío más serio al poder del presidente ruso, Vladimir Putin, en las más de dos décadas que tiene en el Kremlin despierta sospechas dentro y fuera del país.
Desde Estados Unidos, Francia y Reino Unido insinúan que la tesis de que la muerte de Prigozhin y de parte de la cúpula de Wagner ha sido orquestada por Moscú no puede ser descartada, aunque parezca sacada de un guion de una película de Hollywood.
¿La razón? No sería la primera vez que los servicios secretos rusos se deshacen definitivamente de opositores, disidentes o críticos al mandatario.
Aunque abrupta, la desaparición de Prizoghin no se puede considerar inesperada, pues durante el gobierno de Putin al menos una veintena de opositores, críticos o “traidores” han muerto en extrañas circunstancias tanto en Rusia como en el exterior.
Uno de los primeros en perder la vida fue el diputado Vladímir Golovliov, quien fue baleado en Moscú cuando paseaba a su perro. El legislador, que en un principio apoyó al mandatario en su ascenso al poder a principios de siglo, rompió con él al poco tiempo y comenzó a criticarlo.