Las Fuerzas Armadas de Irán confirmaron este lunes que lanzaron una serie de ataques con misiles contra bases militares estadounidenses en Irak y Qatar, en represalia por los bombardeos ejecutados ayer por Washington contra tres instalaciones nucleares ubicadas en territorio iraní.
Uno de los blancos principales del ataque fue la base aérea de Al Udeid, ubicada en Doha, la capital de Qatar, considerada la mayor instalación militar estadounidense en Medio Oriente y sede del Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM). La base alberga a cerca de 10.000 soldados norteamericanos, además de equipos militares de la Fuerza Aérea de Catar y del Reino Unido.
El Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán calificó el bombardeo como una “respuesta proporcional” al “acto agresivo y descarado” cometido por Estados Unidos el día anterior. A través de un comunicado, la entidad indicó que “el número de misiles utilizados en esta exitosa operación fue equivalente al número de bombas que Estados Unidos utilizó en su ataque a las instalaciones nucleares de Irán”.
Según el mismo comunicado, los misiles fueron lanzados lejos de zonas residenciales en Qatar, con el objetivo de no poner en riesgo a la población civil. “Este ataque no supone un acto peligroso contra nuestro país amigo y fraternal, Qatar, y su noble pueblo”, agregó la declaración oficial.
Por su parte, la Casa Blanca confirmó que está monitoreando de cerca la situación en la región. Funcionarios estadounidenses citados por medios locales señalaron que los ataques incluyeron al menos seis proyectiles, entre ellos misiles balísticos de medio alcance (MRBM) y misiles de crucero de corto alcance.
