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El pasado viernes, 27 de diciembre, entró en vigencia la Ley de Identidad de Género que permite a las personas trans cambiar de nombre y sexo registral.
En Ñuble, tras 25 años portando un nombre de mujer, pasó a llamarse Thomas Medel Troncoso marcando un precedente en la región, luego que la mañana de este lunes oficializara ante el Registro Civil el nombre y sexo con el se siente identificado.
Destacó que este procedimiento es una manera de dignificar a las personas trans.
“Estaba ansioso de poder realizarlo, esta ley es algo mínimo que teníamos que tener las personas transexuales o transgénero. El deber de poder tener una dignidad, de que nuestro nombre social se tomara en cuenta como el nombre legal. Era algo que necesitaba hacer por un tema de dignidad, porque en cualquier otro lugar tenía que hacer un trámite bajo mi nombre y mi carnet y me discriminaban, no tomaban en cuenta mi nombre social ni mi sexo”, dijo a La Discusión.
El chillanejo Thomas, de 25 años, señaló que fue expedito solicitar la hora en el Registro Civil, para luego realizar la cabo la ceremonia que certifica el cambio de identidad y género. “Como testigos asistieron mi abuela paterna, que nunca me ha dejado solo, y mi novia. Estuvieron amigos esperándome a la salida de la ceremonia”, dijo.
Considera que la Ley de Identidad de Género es un gran paso para respetar a las personas transgénero y transexuales, sin que sean discriminados.
“Estamos muy desamparados en este país, hay muy poca información. Para Ñuble es muy importante que estas cosas se hagan, se eduque, explique y entienda. Hay harta gente que de repente no entiende porque tiene una menor educación y Chillán siempre estuvo aislado, más campestre y rural es momento de que expandamos la ciudad desde todas las maneras posibles”, añadió.
Niño en cuerpo de niña
Thomas recuerda que fue desde su infancia cuando empezó a sentir que no estaba a gusto siendo una niña, por lo que a los 6 años ya demostraba una conducta masculina.
“Yo había declarado otro tipo de condición y eso no fue de agrado en ninguno de los colegios. En la Purísima estudié hasta 4to básico y ahí le empezaron a manifestar a mi familia que yo era diferente y eso no correspondía porque ese colegio es solamente de mujeres”, subrayó.
Desde ese momento, pasó por varios establecimientos educacionales y con ello, pasó por periodos de dificultades.
“Me comenzaron a cambiar de colegio, tuve problemas, nunca me adapté porque es complicado que uno no se sienta la persona que te dicen que eres. Pasé por temas de rebeldía, inmadurez y falta de cariño por parte de la familia“, indicó.
Egresado de la carrera de Turismo, Thomas ejerce su profesión en Ñubletour.
“Esto ya es un tema zanjado con mi familia. Vivo solo, completé mi educación y no ha sido gracias a ellos, así que el tema de que ellos no hallan querido asumir mi sexualidad, mis gustos o mi forma de ser ya no compete”, puntualizó.