La campaña de José Antonio Kast entró en una fase decisiva y lo hizo entregando el timón a un rostro conocido en Ñuble: Martín Arrau García-Huidobro, exintendente regional y exconvencional, quien fue nombrado jefe de campaña para la segunda vuelta.
El ingeniero de 46 años llega al comando tras semanas de trabajo silencioso y con una hoja de ruta ya diseñada, marcada por mediciones, orden y disciplina, características que han sido su sello desde que comenzó a operar en la política nacional.
Arrau, cuya familia proviene de Ñuble y que ha mantenido un vínculo permanente con el territorio a través de su trayectoria pública y privada, tendrá la misión de ampliar la base electoral de Kast incorporando a dirigentes de Chile Vamos y al Partido Nacional Libertario. Aunque los nombres serán definidos por las directivas, su rol será articular la convivencia entre los distintos mundos de la oposición con miras a enfrentar a Jeannette Jara en el balotaje.
Su llegada a Republicanos
No se trata de un recién llegado. Fue el estratega del despliegue republicano en el proceso constitucional de 2023, donde destacó por su capacidad de planificación.
Antes, el Presidente Sebastián Piñera lo designó como el primer intendente de la Región de Ñuble, cargo desde el cual fortaleció sus redes locales. Desde el sector privado también mantuvo presencia en la zona a través de empresas vinculadas a la multiplicación de semillas, lo que le otorgó conocimiento territorial y vínculos productivos.
Renunció a la UDI durante la Convención, en la que representó a Ñuble y obtuvo un 14,14% de los votos.
Como independiente consolidó su cercanía con los republicanos y generó relación con figuras como Ruth Hurtado y Arturo Squella, integrándose luego al núcleo estratégico del partido.
Su postura en la Convención —crítico de la plurinacionalidad y defensor de la eficiencia del Estado— lo consolidó como una voz doctrinaria dentro del sector.
El desafío ahora será distinto: ordenar un comando complejo, sumar apoyos diversos y transmitir un mensaje de estabilidad económica y seguridad, temas que él mismo ha identificado como urgentes para Chile.
En Ñuble, su nombramiento es leído como un reconocimiento al peso político que la región adquirió en este ciclo electoral y a la influencia que Arrau mantiene en el territorio.
