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El seremi de Obras Públicas, Cristóbal Jardúa, explicó que en el estudio diagnóstico que está realizando la Dirección de Aeropuertos (DAP) del Ministerio de Obras Públicas (MOP) para aeródromos de la Red Secundaria de la macrozona centro sur, también espera ser resolutorio en cuanto a la demanda potencial de pasajeros que utilizaría el transporte aéreo en los tramos Santiago – Chillán.
Este estudio, que tiene fecha de entrega para el mes de noviembre, se enmarca en el análisis de las brechas de infraestructura para la operación de aerolíneas del tipo “low cost”, entre los cuales se incluye el aeródromo Bernardo O’Higgins de Chillán.
El estudio no solo analiza las pistas e infraestructuras del aeródromo chillanejo. De hecho, la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) ya cuenta con uno que certifica al terminal aéreo local con una pista cuyas condiciones está incluso por sobre las exigencias mínimas aceptadas.
El principal obstáculo para cumplir el sueño ñublensino es la factibilidad de que en el Ministerio de Obras Públicas escoja a la ciudad de Los Ángeles por sobre la capital de Ñuble para inyectar los recursos necesarios para darle cabida a los vuelos comerciales nacionales.
“Efectivamente se observa que este (el aeródromo Bernardo O’Higgins) presenta un valor de PCN superior al del aeródromo María Dolores (Los Ángeles), sin embargo esto debe ser analizado en el desarrollo del estudio diagnóstico que ejecuta actualmente la DAP, para así compararlo con el ACN de la aeronave crítica y verificar la posibilidad de operaciones de vuelos comerciales del tipo “low cost” desde el punto de vista de la resistencia de la pista existente”, acotó Jardúa.
Prioridades de Gobierno que además enfrenta a Chillán a otra variable: el anuncio de un tren rápido entre Chillán y Santiago, hecho por el propio Presidente Sebastián Piñera, el pasado 20 de agosto, que podría incluso jugar en contra de las aspiraciones de tener un aeropuerto.
¿Por qué? El pasado 20 de agosto, el presidente del directorio de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), Pedro Pablo Errázuriz, comentó en Chillán que “Chillán es muy importante, porque tiene una distancia muy característica, pues el tren puede ser mejor que los buses, pero además es mejor que los aviones, a diferencia de distancias más largas que hacen que los aviones aparezcan como un actor muy clave”.
Las ventajas de Chillán
El ex seremi del MOP en Ñuble, Ignacio Vera, quien hoy está dedicado a actividades personales, destacó las diferencias entre los aeródromos de Ñuble y el de Los Ángeles, precisando entre ellas la torre de control que acá sí existe y no en la Provincia del Biobío.
“Me parece que en Los Ángeles hay que invertir mucho más, y además, si se quiere habilitar un aeropuerto para fines comerciales, la DGAC exige un carro bomba especial para incendios en aeropuertos, lo que vale millones de dólares y construirlos toma meses. Entonces: ¿quién se va a poner con esa plata? La ventaja para Chillán es que cuenta con un Consejo Regional (CORE) que está muy comprometido con el crecimiento de la nueva región, en cambio Los Ángeles depende del CORE Biobío”.
Dentro de las desventajas que observa en Ñuble el ingeniero, sostiene que es clave la cantidad de pasajeros que están dispuesto a ir a una u otra ciudad pagando un vuelo.“Para muchos santiaguinos, ir a Chillán o a Carriel Sur (Concepción) es casi lo mismo, si lo que se busca es seguir, por ejemplo a Temuco, y en ese sentido Los Ángeles corre con ventaja”, precisó.
Más lejos que Arica
Alejandro Lama, piloto, socio del Club Aéreo local y presidente de la Cámara de Comercio de Chillán, plantea que las posibilidades del negocio hortofrutícula son la clave para que la opción se quede en Ñuble.
Argumenta que “Ñuble es, tras La Araucanía, la región más pobre de Chile, sin embargo eso, sumado a que somos una nueva región que está en proceso de crecimiento, ha hecho que muchos empresarios santiaguinos busquen invertir en la agricultura local. Al menos, por un tema de clima, ahí tenemos ventajas con Los Ángeles”.
Agrega que muchos empresarios “me han dicho que para ellos es más corto ir a Arica o a Punta Arenas o a Concepción que ir a Chillán, porque para esas ciudades hay vuelos, en cambio para acá solo pueden venir por tierra y demorarse cuatro horas y cuatro horas para allá. Y entonces es claro que el auge en la agricultura, y por lo tanto en toda la economía local, crecería una enormidad con vuelos comerciales, y eso es, sin duda, algo que debe tomarse en cuenta para una decisión final”.