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Tras evaluar 134 muestras de vinos campesinos en competencia, el jurado del 11° Concurso del Vino del Valle del Itata, del Indap, entregó las medallas a los mejores en ocho categorías, donde además de las cinco tradicionales (País, Moscatel, Cinsault, Espumante y Otras Cepas), este año se añadieron tres: Mujeres Indap; Jóvenes Indap y Prácticas Sustentables.
Juan Bustamante Salgado, de 83 años, viñatero del sector Panguilemu, de Portezuelo, fue uno de los grandes ganadores de la competencia, pues obtuvo Medalla de Oro al Mejor Vino del Concurso y al Mejor Vino País. “Me siento plenamente agradecido de Indap y del Programa Prodesal de Portezuelo porque siempre nos están ayudando, nos están enseñando. Sabemos que todos los productores hacen un sacrificio grande y a mi edad no pensaba ganar este premio. Con esfuerzo y sacrificio hemos sabido salir adelante”, declaró emocionado el productor de vino a granel.
También destacó Arnaldo Hinojosa Venegas, de Coelemu, quien comenzó a embotellar el año pasado y en esta versión se llevó tres galardones: Mejor Cinsault, Mejor Moscatel de Alejandría y el Mejor Vino Producido por Jóvenes.
En tanto, en la categoría Otras Cepas, el premio fue para Luis Lagos, de Guarilihue (Coelemu) con un Semillón; y el Mejor Espumante, para Bernardo Cortez Molina, de Los Maquis, Portezuelo.
En cuanto a las categorías Mejor Vino con Prácticas Sustentables, la medalla de oro la recibió Vinos Mingaco, de Checura, Coelemu; y Mejor Vino producido por Mujeres quedó en manos de Consuelo Venegas Castillo, de Coelemu.
El jurado lo integraron enólogos y sommeliers como Edmundo Bordeau, Carla Urrunaga, Luis Campos, Mariana Martínez, Nadia Parra, Demy Olmos, Fabián Lara, Felipe Aldunate, Edgardo Candia, Nury Gahona y Clara Arteaga.
La ceremonia de premiación se realizó en la Viña Cucha Cucha, en Portezuelo, con la colaboración de Arauco.
Patrimonio
El enólogo y docente del Universidad Católica de Chile, Edmundo Bordeau, quien recibió un reconocimiento por su trayectoria, afirmó que “los últimos diez años los vinos del Valle del Itata han mejorado su calidad, pero siempre manteniendo sus cualidades que los hacen diferentes a otros vinos de Chile, como sus cepas patrimoniales, su ubicación geográfica y prácticas de los vinicultores”.
Por su parte, la directora regional de Indap, Fernanda Azócar Rodríguez, subrayó que “estamos enfocados en avanzar hacia mercados inclusivos con una agricultura sostenible y resiliente y esos valores están muy bien contenidos en todo el quehacer del Valle del Itata y toda la producción de vinos, donde las cepas patrimoniales son protagonistas, de la mano de campesinas y campesinos que practican día a día esos conocimientos ancestrales que definen su estilo de producción agrícola y, sobre todo, su estilo de vida. Es aquí donde mujeres y jóvenes se vuelven protagonistas para poder salvaguardar esos saberes de la mano de la innovación para producir más y mejores vinos”.
De igual manera, el delegado presidencial, Rodrigo García, manifestó que, “como gobierno, no solo nos interesa el fomento productivo, muy importante para que esta actividad se siga realizando, pero también es importante destacar la identidad y el valor patrimonial de la producción del campo chileno”.
