Lo que debía ser una jornada legislativa habitual en la Cámara de Diputadas y Diputados terminó convirtiéndose en un hecho poco común: la suspensión de la sesión por falta de cuórum.
Como es habitual los días miércoles, el hemiciclo debía sesionar entre las 10:00 y las 14:00 horas para debatir diversas iniciativas de ley. En la tabla figuraban temas relevantes, como la rebaja de multas por fertilizantes en el ámbito agrícola —iniciativa presentada por la ministra del ramo—, el proyecto que otorga titularidad a profesores contratados a plazo fijo por más de tres años, y la propuesta que busca establecer un permiso laboral por fallecimiento de una mascota, entre otros.
Sin embargo, el debate no pudo concretarse. De los 155 parlamentarios y parlamentarias en ejercicio, se requería la presencia de al menos 53 para dar inicio a la sesión. No obstante, solo 43 estaban en la Sala, lo que obligó a la Mesa a suspender la jornada por falta de cuórum.
El hecho llamó la atención tanto dentro como fuera del Congreso, ya que es la primera vez en mucho tiempo que una sesión ordinaria no logra comenzar por ausencia de parlamentarios.
El diputado de la UDI, Henry Leal, uno de los que sí estaba en Sala para realizar sus funciones, entregó su parecer sobre este bochornoso episodio en el Congreso Nacional.
“Habíamos 43 diputados en la Sala y eso motivó que el presidente cierre la sala. Firmamos el libro y la sesión fracasó. Eso es lamentable porque tenemos que cumplir con nuestro deber. Y ahora los que no estaban tendrán que pagar las multas respectivas, pero lo relevante es que dejamos de trabajar un día hábil, y de sacar algunos proyectos de ley adelante”, señaló a radio ADN.
