Se desata pugna electoral entre Felipe Camaño y Jorge Sabag en medio de comisión investigadora por derechos de agua

La política en Ñuble entra en un nuevo capítulo de tensión y acusaciones cruzadas con la arremetida del diputado independiente-DC, Felipe Camaño, contra la familia Sabag, por supuestas irregularidades en la entrega de derechos de aprovechamiento de aguas en las regiones de Ñuble y Bíobío.
La ofensiva, canalizada a través de una Comisión Especial Investigadora en la Cámara de Diputados, ha generado reacciones inmediatas desde diversos sectores, incluyendo a la diputada exDC, Joana Pérez, y al propio Jorge Sabag, exdiputado y aludido directamente en la denuncia.
La situación ha desatado un conflicto interno en la Democracia Cristiana, donde parte de la militancia se inclina por respaldar la gestión parlamentaria de Camaño, mientras otros sectores reafirman su cercanía con Sabag, quien estaría evaluando su regreso a la Cámara en los próximos comicios, esta vez como independiente en un cupo DC.
El eventual choque entre ambos por un cupo en la colectividad ha encendido la disputa a niveles inusualmente intensos para este punto del calendario electoral.
Durante una intervención en la Sala de la Cámara, en el marco de la aprobación del informe de la comisión investigadora, Camaño afirmó que “mucha gente nos ha advertido de tener cuidado con impulsar comisiones investigadoras como ésta, contra una familia poderosa conocida en las regiones de Ñuble y Bío Bío, como es la familia Sabag, pero hoy, siendo parlamentario, tenemos que condenar los hechos de corrupción y no podemos callar”, declaró.
Camaño defendió la legitimidad de la comisión investigadora, compuesta por 13 parlamentarios de distintos sectores políticos.
“Ésta fue aprobada de manera transversal, fue presidida por el diputado Frank Sauerbaum (RN), y participaron parlamentarios del oficialismo, la oposición, e independientes. Minimizar este trabajo es bajar el perfil a hechos que afectan directamente a 8.000 familias y a toda una cuenca declarada agotada”, señaló.
¿Utilización política?
Sin embargo, entre los parlamentarios surgieron críticas a la estrategia del legislador. La diputada Joana Pérez (ex DC, hoy Demócratas) acusó a Camaño de “instrumentalizar políticamente” una instancia legislativa seria.
“He estado en muchas comisiones investigadoras, y nunca había visto una tan utilizada políticamente. Esto tiene tintes de campaña anticipada. Lo que busca no es esclarecer, sino perjudicar a un posible contendor”, afirmó, defendiendo además la legalidad de las acciones de la DGA y recordando que el caso incluso fue revisado por Contraloría, que se abstuvo de emitir pronunciamiento por estar judicializado.
Ante sus dichos, Camaño reaccionó con dureza.
“Lo que dice la diputada Pérez es falso. Esta fue una comisión seria, que sesionó incluso en la región del Biobío, con cerca de 20 invitados. Además, producto de esta comisión, la DGA desvinculó a altos funcionarios. Eso demuestra la gravedad de lo investigado. Que haya diferencias internas en la DC no puede deslegitimar una denuncia de esta magnitud”, afirmó, insistiendo en que su labor responde a una función fiscalizadora, no a intereses electorales.
El exdiputado, Jorge Sabag, aludido directamente en el caso por sus presuntos vínculos familiares con la asociación canalista beneficiada, también salió al paso de las acusaciones.
“Llama la atención que, mientras uno anda en terreno trabajando con las distintas organizaciones sociales, otros prefieran hacer intervenciones de esta forma, que parecen más parte de una campaña anticipada que de un trabajo legislativo”, dijo.
Acusó un “aprovechamiento político” para dañarlo personalmente y a su familia, “justo cuando comienza a hablarse de una eventual candidatura mía”. Y agregó: “Ñuble se construye con todos, no con zancadillas ni intervenciones para la galería”.