Ruptura entre Donald Trump y Elon Musk desata una guerra de acusaciones

La relación entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el empresario Elon Musk ha sufrido una ruptura tan rápida como fue su acercamiento inicial. Lo que comenzó como una alianza estratégica marcada por elogios y colaboración, ha terminado en una confrontación pública cargada de acusaciones, sarcasmos y un potencial escándalo mayor.
Durante una reunión en la Oficina Oval con la canciller alemana como testigo, Trump expresó su “profunda decepción” con Musk, quien hasta hace poco fue uno de sus asesores más visibles del sector tecnológico. El Mandatario hizo referencia al creciente distanciamiento con el dueño de Tesla y SpaceX, quien ha criticado duramente el “Hermoso Proyecto de Ley” de recortes de impuestos promovido por el gobierno republicano, calificándolo como una “abominación repugnante” que, según él, aumentará peligrosamente el déficit federal.
La tensión escaló cuando Musk respondió en tiempo real desde su cuenta en X (anteriormente Twitter), lanzando un comentario directo y mordaz: “Sin mí, Trump habría perdido la elección. Qué ingratitud”. El empresario también ironizó sobre su salida del gobierno, realizada en una conferencia de prensa sin mayores ceremonias, en la que apareció con un ojo morado —que atribuyó a un accidente doméstico—, pero que muchos interpretaron como una metáfora visual de su agitado paso por el gabinete.
Trump, fiel a su estilo, no dejó pasar la oportunidad para comentar la apariencia de su exaliado. “Le dije, ‘¿Quieres un poco de maquillaje? Te conseguiremos un poco de maquillaje’. Lo cual es interesante”, dijo entre risas, aunque dejando entrever su incomodidad con el distanciamiento.
Sin embargo, lo más explosivo aún estaba por venir. En una publicación posterior, Musk arrojó una grave insinuación: “Es hora de lanzar la gran bomba: Trump está en los archivos de Epstein. Esa es la verdadera razón por la que no se han hecho públicos”. La afirmación hace alusión directa al caso del fallecido magnate Jeffrey Epstein, acusado de explotación sexual y de operar una red de tráfico de menores con clientes del más alto perfil.
El comentario ha provocado un terremoto político y mediático, reavivando las exigencias para que el Departamento de Justicia dé a conocer los nombres de quienes figuran en los registros de vuelos y archivos vinculados al caso Epstein.