El Gobierno, a través del Ministerio del Medio Ambiente y la Corporación Nacional Forestal, dieron a conocer las imágenes obtenidas por las cámaras trampas ubicadas en la Reserva Ñuble, las que totalizan al menos 300 especies endémicas de la flora y fauna de aquella zonas cordillerana de la región.
Si bien el monitoreo a especies bajo amenaza en la Reserva Ñuble se extiende por once años, solo en el último, fue aplicado un nuevo modelo estándar, que consiste en la instalación de cámaras trampa en 60 puntos seleccionados al azar, los que son monitoreados todos los años, en la misma fecha y por el mismo periodo, para que los resultados sean comparables en el tiempo, según lo dio a conocer el director regional de la Conaf, Juan Salvador Ramírez.
Durante este primer monitoreo bajo la nueva modalidad, se ob- tuvieron 30.286 fotografías, de la cuales 829 corresponden a fauna, identificando 12 especies diferentes de aves, como aguilucho, tórtola, canquén, pato real, bandurrilla, pitio, entre otros y 11 especies diferentes de mamíferos como Gato colo colo, zorro culpeo, puma, pudú, huemul, roedores, especies silvestres no nativas como liebres y algunos ejemplares de animales domésticos en zonas limítrofes como caballo y vacuno.
Destacable es el hallazgo de pudú en el centro de la reserva, donde no se tenían antecedentes anteriores de esta carismática especie y el huemul, gato colocolo y puma, especies conocidas en la reserva, pero relevantes de registrar, dado que fueron seleccionados y relavados como objetos de conservación en el nuevo Plan de Manejo de la reserva.
Ramírez destacó “el gran despliegue territorial y esfuerzo de nuestros guardaparques en la instalación y retiro de las cámaras, dada la gran extensión y difícil topografía de esta reserva nacional, la que cubre más de 75 mil hectáreas. Lo mismo ocurre en el análisis y procesamiento pos- terior de las más de 3 mil fotografías obtenidas en terreno”.
Si bien la reserva no se encuentra abierta al público, “nuestro personal de guardaparque actualmente se encuentra realizando el segundo monitoreo (temporada 2022-2023) estandarizado con cámaras trampa, cuyos resultados se espera presentar al público a medidos del presente año, para luego continuar con monitoreo de flora, así como mantención y mejoramiento de infraestructura y senderos”, agregó.
La Reserva Los huemules de Niblinto esta temporada también se está comenzando la implementación de esta metodología estandarizada, como una forma de adelantarse a la futura actualización de su Plan de Manejo, destacaron desde la Conaf.
Plan de conservación del huemul
Por su parte, el seremi del Medio Ambiente, Mario Rivas, afirmó que en conjunto con Conaf llevan adelante un plan de conservación del huemul cuyo objetivo es aumentar en un 10 por ciento su población.
