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En las oficinas de la Seremi de Agricultura, se realizó una reunión entre los pequeños y medianos productores de berries de la provincia de Punilla junto al seremi de Agricultura, Fernando Bórquez, el seremi de Economía Roger Cisternas y el gobernador provincial de Punilla, Cristóbal Martínez, quien convocó el encuentro.
El objetivo de la cita era que las pymes pudieran exponer algunos problemas que atraviesan, en plena temporada de cosecha, y buscar soluciones junto a las autoridades convocadas.
Entre los aspectos planteados por los productores se cuenta la incertidumbre por los bajos precios de la fruta, denuncias por colusión en los mismos, además de aranceles demasiado elevados para sus certificaciones. A eso se suma la posibilidad de conformar una mesa de trabajo para lograr constituirse en una cooperativa e instalar sus productos en mercados internacionales.
“Levantamos las problemáticas de pequeños agricultores de berries (…) Estamos viendo la posibilidad de apoyarlos principalmente en la asociatividad de tal manera que obtengan valores mucho más competitivos”, dijo la autoridad provincial.
Agregó que “quedamos con reuniones pactadas para enero y seguir avanzando y apoyarlos en soluciones concretas”.
Wilson Palma, productor orgánico de berries de la comuna de Coihueco, representante de agricultores de este rubro en toda la región, expuso que “nos dieron el apoyo evidente para participar en una mesa de trabajo futuro. Me voy muy contento (…) nos recibieron de muy buena forma, pusieron todas las herramientas a nuestra disposición, para iniciar los trámites y formar una cooperativa”.
Por su parte, el Seremi de Agricultura, sostuvo que “logramos un acuerdo, que va a ser muy importante, que va a ser la formación de una cooperativa que permita ir avanzando en forma conjunta, vender su producción e ir avanzando hacia una exportación directa, porque son muchos los productores, todos pequeños y en forma personal no van a lograr mucho”.
Bórquez comparó la situación de los productores de berries con los viñateros del Valle Del Itata, quienes en la vendimia pasada lograron reunir a cinco pequeñas cooperativas y vendieron conjuntamente su producción, logrando como beneficio un aumento sustancial en el precio de venta.
