El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha sorprendido al país al anunciar una pausa en su agenda pública para reflexionar sobre su futuro político, tras una denuncia contra su esposa, Begoña Gómez, por supuesta corrupción y tráfico de influencias.
En una carta dirigida a la ciudadanía, que hizo pública a través de una red social, Sánchez lamentó el “ataque sin precedentes” contra su esposa y cuestionó si vale la pena seguir enfrentando esta situación. “Me urge responderme a la pregunta de si merece la pena, pese al fango en el que la derecha y la ultraderecha pretenden convertir la política. Si debo continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor”, expresó el jefe del Ejecutivo.
La denuncia contra Begoña Gómez se basa en acusaciones de tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Se argumenta que, aprovechándose de su posición, Gómez habría respaldado supuestamente a empresarios en licitaciones públicas, incluso uno de los cuales recibió contratos por valor de 10 millones de euros y luego organizó un máster en el Africa Center, institución dirigida por la propia Gómez en el Instituto de Empresa.
Esta situación ha generado un clima de incertidumbre en la política española, con especulaciones sobre el futuro de Pedro Sánchez al frente del Gobierno. La decisión final se espera para el próximo 29 de abril, cuando el presidente comunicará su postura ante la opinión pública.