Tras las marejadas registradas en la costa ñublensina y en el resto del país, el Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres, explicó el fenómeno que ha afectado desde ayer a la región de Ñuble inundando zonas y causando daños a la infraestructura, en particular, en el sector de Perales en Coelemu.
Según el director del Cigiden y académico del departamento de Hidráulica de la Universidad Católica, Rodrigo Cienfuegos, las marejadas de las últimas jornadas han sido generadas por tormentas registradas en el Pacífico, en cercanías de la Antártica Australiana.
“Cuando vemos llegar estas marejadas, que en término en inglés es swell, son oleajes generados por tormentas lejanas, que están a miles de kilómetros de Chile y normalmente incluso llegan con buen tiempo. En este caso, estuvimos recibiendo el oleaje generado por tormentas en la parte del Pacífico cercana de la Antártica hacia Australia”, indicó.
El docente puntualizó que sus características han sido inusuales, debido a que han sido más extensas de lo habitual. “El periodo, es el tiempo que pasan entre cada ola, son bastante largas. Tenemos el orden de 18 segundos o 20 segundos, cuando lo normal es que recibamos en promedio oleajes con periodos de 12 segundos o 10 segundos. Entonces, son marejadas distantes, que son generadas por tormentas bien distantes, y eso hace que lleguen con estas características más inusuales”.
Según el experto en las marejadas recientes se han conjugado dos fenómenos que han generado mayor nivel de inundación.
“Estas marejadas de generación distante, por tormentas distantes, junto con condiciones de mareas más altas en el mes. En estos días estábamos cercanos a la luna llena, y cuando tenemos luna llena se registran las mareas más altas. Entonces, estas olas se montan sobre esos niveles de marea más altos, y alcanzan un nivel de inundación también más grande”, aclaró.
Consultado por su duración en el tiempo, el docente explicó que dependerá de ciclo lunar. “En la medida que las mareas empiecen a ir disminuyendo, que con el ciclo natural de la luna debiéramos también tener menores efectos en la intensidad, pero hemos tenido una actividad bastante importante de generación de marejadas de tormentas que se generan en la parte sur del suroeste del Pacífico”, dijo.
El académico recalcó que las marejadas también han generado ondas de infragravedad, lo que aumenta su peligrosidad. “Eso es lo que uno ve cuando de repente llegan las olas y hay algunas que pasan sorpresivamente más lejos y esas son muy peligrosas, porque estamos mirando que las olas llegan hasta un cierto punto y de repente como que pasan mucho más lejos y eso ocurre porque se generan esta ondas que hacen que hayan grupos de olas que puedan llegar lejos”, describió.