Por años, la Plaza de Armas de Chillán ha sido el punto neurálgico de la ciudad, desde el cual es posible recorrerla en forma equidistante hacia los diversos puntos cardinales, permitiendo adentrarse en el perímetro de las cuatro avenidas del casco histórico y urbano.
Fue planificada desde el origen del Chillán actual. El “pueblo nuevo” quedó definido en noviembre de 1835 luego que por disposición del Presidente de la época, el general Joaquín Prieto, se dispusiera del traslado de la ciudad desde el hoy Chillán Viejo, luego que fuera arrasada por un terremoto.
La cuarta fundación de Chillán comenzaría por su emblemática plaza mayor. Fue en este punto, a partir del cual Carlos Francisco Ambrosio Lozier, ingeniero contratado por el Gobierno, comenzaría a trazar la nueva urbe, sobre la cual diseñó un damero clásico y de perfección matemática.
“Allí se indicó a Lozier que trazara las calles rectas de norte a sur magnético; que la ciudad fuese un cuadrado geométrico perfectamente regular, y las calles paralelas a los lados del gran cuadrado que debía formarse con las 200 cuadras compradas para la ciudad”, consignó entonces el historiador Reinaldo Muñoz Olave, quien en representación del Obispado de Concepción, fue testigo de las tratativas para el traslado de Chillán hasta su actual emplazamiento, entre las autoridades y el propietario de buena parte de los terrenos, Domingo Amunátegui.
Otra particularidad fue que se dispuso que frente a cada ubicación de un templo religioso, se levantara enfrente una plaza, lo que se aprecia hoy con las actuales plazas Héroes de Iquique, La Victoria y Pedro Lagos.
La Plaza de Armas de Chillán se consolidó como uno de los puntos de encuentro de la comunidad. El lugar alcanzó un realce mayor en 1919 con la inauguración de su símbolo principal, el Monumento a O’Higgins. La pieza fue encargada en 1910, tras la publicación, el 3 de agosto de ese año, de la Ley 2.336, que autorizó erigir la figura del Libertador en el marco de las celebraciones del centenario de la república.
La obra, encargada a la prestigiosa Fundición Negri y Boher, “está ubicada sobre un plinto de piedra en cuya base encontramos al frente a Clío, la musa griega de la historia y la poesía heroica, la cual está representada con el libro de Tucídides y una corona de laureles. A sus costados encontramos diversas escenas y símbolos de las guerras de independencia, donde se destaca al pueblo mapuche, como parte de las influencias en la formación del héroe nacional. Bernardo O’Higgins es considerado el Padre de la Patria”, destaca en su descripción el Consejo de Monumentos Nacionales de Chile.
Encuentros masivos
Casi en forma natural, la Plaza de Armas de Chillán, por el costado norte, junto al frontis de la actual Intendencia de Ñuble, se transformó en punto obligado de celebraciones masivas, destacando los logros alcanzados por Ñublense, en sus continuos ascensos de divisiones, hasta triunfos electorales y durante los últimos años, además, festejos ciudadanos y Fiestas Patrias. En este último ítem, la plaza ha pasado a ser el eje central de la Fiesta de la Chilenidad, celebración que terminó por dejar en un segundo plano a las tradicionales ramadas, congregando este año a cerca de 150 mil personas en nueve días de funcionamiento.
A la Fiesta de la Chilenidad, se han ido sumando además celebraciones como la Fiesta del Vino y la Fiesta de la Longaniza, considerando el atractivo emplazamiento geográfico que muestra la plaza principal para los chillanejos.
La masividad de estos encuentros llevó a urbanistas y arquitectos a advertir sobre eventuales daños al patrimonio, por lo que las autoridades de la ciudad analizan hoy nuevas alternativas para eventos masivos.
Otro de los hitos, corrió por cuenta de la inauguración, el 15 de diciembre de 2018, de los baños públicos, iniciativa del municipio emplazada frente al costado poniente.
Pese a críticas de historiadores que cuestionaron la cercanía con el Monumento a O’Higgins, la obra finalmente recibió el aval del Gobierno, a través del Senadis, aludiendo a la inclusión de personas con discapacidad y de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Chillán, para la que los baños representan un anhelo especialmente entre adultos mayores.
Modernización
165 años después de su habilitación, la Plaza de Armas de Chillán será modernizada completamente para adaptarla a los actuales requerimientos de la ciudadanía.
El primer paso fue el financiamiento, por parte del Gobierno Regional del Biobío, de alrededor de 200 millones de pesos para el diseño de las futuras obras.
La iniciativa propone, entre otras cosas, la nivelación de las calzadas a la altura de las aceras en las calles que circundan el espacio público, como Arauco, Constitución, Libertad y 18 de Septiembre, junto al ensanchamiento de la acera del Teatro Municipal.
También se destacará la explanada del edificio de la Intendencia como un lugar de encuentro, eventos y manifestaciones sociales.
Asimismo, se plantea unir la plaza con el Patio de los Naranjos mediante la construcción de un nuevo eje que inicie en dicho patio y termine en la calle Constitución, pasando por el centro del área verde, valorizando el Monumento a Bernardo O’Higgins.