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La diputada por la Región de Ñuble, Marta Bravo (UDI), presentó esta semana -tal como lo había anunciado- un proyecto de ley para rebajar el número de parlamentarios de 155 a 120, volviendo de esta manera a lo que existía hasta el año 2015, antes de que la ex Presidenta Michelle Bachelet propusiera reformar el sistema.
La parlamentaria gremialista recordó los resultados de la encuesta Cadem del 31 de marzo, donde los chilenos no sólo evaluaron con nota 3,1 el sistema político, sino que -además- un 83% dijo estar de acuerdo con disminuir la cantidad de legisladores.
Pero además, la representante del Distrito 19 argumentó que las reformas que se hicieron a partir del año 2015 “no cumplieron con la promesa de mejorar la política en nuestro país”, derivando -por ejemplo- en que candidatos con menos de mil votos (0,24%) salieran electos como diputados, incentivando así al llamado “discolaje”, lo que finalmente dificulta cualquier posibilidad de acuerdo.
“Es absolutamente ineludible una reforma al sistema político. No hay ninguna duda de que el actual régimen que tenemos en nuestro país está atravesando por una grave y profunda crisis, afectando tanto la gobernabilidad como también la credibilidad hacia el sistema. Lamentablemente, y tal como se advirtió en su minuto, las reformas que se impulsaron el año 2015 no cumplieron con la promesa de mejorar la política y garantizar una mayor representatividad. Por el contrario, terminaron por fragmentar el Congreso, haciendo inviable cualquier tipo de entendimiento”, cuestionó Marta Bravo.
Por lo mismo, la parlamentaria por Ñuble emplazó al Gobierno a comprometerse con dicha reforma, asegurando que “perfectamente se puede tramitar en paralelo a los otros proyectos de ley que tenemos”, insistiendo en que “es fundamental que establezcamos nuevas barreras de entrada y rebajemos la cantidad de legisladores, porque ha quedado demostrado que haber aumentado de 120 a 155 diputados no significó una mayor representatividad y sólo terminó polarizando el sistema”.
Pero además, Bravo recordó que en enero de este año, la Bancada de Diputados de la UDI presentó otra reforma relacionada con el sistema político, que obliga a los partidos políticos a obtener al menos un 5% de los votos a nivel nacional para ingresar y formar parte del Congreso, salvo que en todo el país hayan obtenido ocho o más parlamentarios. Asimismo, establece la cesación del cargo para todos los parlamentarios que decidan renunciar a la colectividad por la que fueron electas.