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La Municipalidad de Chillán recibió el estudio del expediente de Zona Típica que fue elaborado por el Magíster en Patrimonio de la Universidad del Bío-Bío y que contiene los fundamentos para que el Consejo de Monumentos Nacionales (CMN) priorice un cuadrante de la ciudad como zona de protección o con normas especiales de construcción, para preservar su legado arquitectónico, cultural e histórico.
El informe es calificado como el documento más completo que existe sobre la historia de Chillán y de su desarrollo urbano y arquitectónico, y en su conformación participaron docentes y estudiantes de la casa de estudios.
La presentación del voluminoso informe, de 400 páginas, se realizó durante una reunión de trabajo realizada en la Municipalidad de Chillán, la que fue encabezada por el alcalde Sergio Zarzar y donde estuvieron el arquitecto Claudio Martínez y personeros de la Corporación Ñuble Transversal, que ha promovido la Zona Típica.
El alcalde Sergio Zarzar planteó: “hemos estado conversando sobre el tema, hemos intercambiado opiniones y tenemos legítimas diferencias”.
Zarzar agregó que ambas partes seguirán reuniéndose, pues lo que los motiva es el desarrollo de la ciudad, pero agregó que “en las ciudades donde se han plasmado ideas que ellos tienen, se puede complicar el desarrollo de políticas urbanas”.
El arquitecto Claudio Martínez destacó que “la Corporación Ñuble Transversal, fue invitada en la condición de organización civil que promueve la creación de una Zona Típica en el casco histórico de Chillán”.
La propuesta que se expresa en el informe de la tesis de Patrimonio urbano de la UBB considera un polígono que incluye tres áreas con alturas diferenciadas de 15, 21 metros y una más próxima a las cuatro avenidas incluyendo ambas veredas de 31 metros.
“Con esta propuesta, que puede traducirse en seccionales específicos, se cumple un doble propósito, de preservar el patrimonio arquitectónico por un lado y mantener la escala de ciudad amable y humana, que el más valioso capital de Chillán”, según el arquitecto Martínez.
El informe fue desarrollado bajo tres perspectivas: morfológica, histórica y sociocultural, por un equipo multidisciplinario conformado por profesionales de distintas áreas de las ciencias sociales, arquitectura, historia, sociología y diseño; cuyo propósito fue realizar una triangulación de datos y síntesis de la información obtenida, a partir de los tres estudios.
Según el informe, desde el punto de vista de los espacios públicos, se reconocen en la zona importantes conjuntos con valor patrimonial, debido al intercambio social y comercial (rural y urbano) que estos generan y han generado a lo largo del tiempo, siendo un ejemplo claro de ello el Mercado Central Techado y la Plaza del Mercado Sargento Aldea, “categorizados en este estudio como inmueble y espacio público respectivamente, los cuales se han convertido en íconos representativos de este intercambio”.
De igual manera, precisa el informe que “es reconocible la relación espacial que se da entre las cinco plazas céntricas: la plaza central y las cuatro plazas que conforman un anillo central en el damero; con sus iglesias, evidenciando el valor en la impronta religiosa”.
Esta identidad de Chillán se encontraría representada fielmente en el polígono compuesto por las avenidas Gamero, Sargento Aldea, El Roble, Yerbas Buenas, Maipón, Sargento Aldea, Arturo Prat, O’Higgins, Constitución, Brasil, Libertad”.
Siete subsectores
El estudio, que contiene fichas de los principales hitos arquitectónicos, divide el polígono base en siete subsectores, donde se entrecruzan las tres capas de análisis desarrollados.
Para los profesionales que participaron en la confección del estudio, el terremoto de 1939 dio paso a la reconstrucción de Chillán bajo los preceptos de la arquitectura moderna “inmersa en un contexto de renovación que se estaba dando a nivel mundial y local, lo cual cambió la fisonomía arquitectónica de la ciudad”.
En el casco histórico se pueden en encontrar numerososejemplos de viviendas de arquitectura moderna con valor patrimonial, las que se emplazan principalmente dentro del anillo de las cuatro plazas y en los ejes de Avenida Libertad y calle 18 de Septiembre.
En esas construcciones es posible apreciar “atributos como el uso de muros curvos, torre, ojo de buey, voladizos, uso de vidrio y hormigón armado”.
Para desarrollar el estudio, que tiene una versión que ya fue entregado al Consejo de Monumentos Nacionales(CMN), se aplicó una metodología cualitativa, en donde se analizaron los informes y planimetrías tanto históricos, socioculturales y morfológicos, realizadas para el área haciendo un cruce de información, con el fin de efectuar una interpretación integral de estas tres investigaciones.
En relación al área de estudio, corresponde al casco urbano histórico de la ciudad, el cual comprende 144 manzanas y está enmarcado por sus avenidas perimetrales: venidas Brasil, Avenida Ecuador, Avenida Argentina y Avenida Collín.