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Señor Director:
En Chile, la Enfermedad de von Willebrand (EvW) ha estado en las sombras durante demasiado tiempo, afectando silenciosamente a un número significativo de ciudadanos. Es el momento de que se otorgue la debida atención a esta situación y se le asigne la importancia que merece dentro del sistema de salud.
La EvW, un trastorno hemorrágico hereditario, no solo tiene un impacto en la vida de quienes la padecen, sino que también impone una carga financiera considerable. Los tratamientos mensuales esenciales para controlar los episodios de sangrado no están actualmente cubiertos por la canasta Garantías Explícitas en Salud (GES), dejando a las familias con una responsabilidad económica abrumadora. Esta situación plantea desafíos significativos y demanda una pronta acción por parte de las autoridades gubernamentales.
Cuando observamos los síntomas, desde hemorragias nasales persistentes hasta sangrados prolongados en cortaduras menores, es evidente que la EvW no puede ser ignorada. La detección temprana y el manejo efectivo son fundamentales, y es por eso que instamos a la población a buscar la atención de un médico hematólogo ante cualquier indicio de la enfermedad.
Es responsabilidad del Estado asegurar que todos los ciudadanos tengan acceso equitativo a tratamientos efectivos, especialmente en el caso de condiciones que influyen de manera significativa en su calidad de vida.
La inclusión de la Enfermedad de von Willebrand en el GES no solo aliviaría la carga económica para las familias afectadas, sino que también enviaría un mensaje claro y poderoso: en Chile, nos comprometemos activamente con el cuidado y promoción de la salud de cada uno de los ciudadanos, procurando su bienestar integral. Es fundamental que la EvW deje de ser una enfermedad invisible y olvidada y obtenga la atención y la asignación de recursos que merece.
La salud de nuestra sociedad depende de acciones concretas. Es hora de que las autoridades demuestren su compromiso con la equidad en el acceso a la salud, asegurando que ninguna persona quede excluida. Incluir la EvW en el GES no es solo un acto de justicia, sino un paso esencial hacia una sociedad más saludable y equitativa.
Pablo Sepúlveda
Mercado Hematólogo- Oncólogo pediátrico
