¿Chillán debería cambiar el nombre de la calle Francisco Ramírez Ham?

Esta semana se conoció sobre una solicitud formal para revisar y modificar el nombre de la calle “Francisco Ramírez”, ubicada frente al Hospital Clínico Herminda Martín, en la prolongación de Avenida Libertad. Se trata de una carta dirigida al alcalde Camilo Benavente y el Concejo Municipal y fue ingresada recientemente al municipio de Chillán por parte de la Dirección Regional de Patrimonio Cultural de Ñuble y el Instituto O’Higginiano filial Ñuble.
El particular requerimiento se fundamenta en que la actual denominación se asocia erróneamente a un femicida múltiple que estremeció a la ciudad a comienzos del siglo XX.
Según lo expuesto en el documento dirigido al alcalde, la nomenclatura vigente aludiría a Francisco Ramírez Ham, quien en 1922 asesinó a sus cuatro hijas menores de edad arrojándolas al río Ñuble, hecho que fue cubierto profusamente por la prensa de la época, incluida La Discusión. Esta trágica historia, profundamente arraigada en la memoria local, aún causa consternación entre quienes conocen los antecedentes.
Según el director del Servicio de Patrimonio Regional Claudio Martínez; y del director del Instituto O’Higginiano, Marcial Pedrero, la intención original habría sido rendir homenaje al padre de Ramírez Ham, Isaías Francisco Ramírez, destacado ciudadano chillanejo y comerciante, cuyo legado nada tiene que ver con el crimen. Sin embargo, la omisión del nombre “Isaías” en la nomenclatura habría generado “una lamentable confusión”.
“La nominación actual no solo resulta inadecuada desde una perspectiva patrimonial, sino también desde una óptica ética y social. Es urgente subsanar este error para resguardar el respeto por la memoria y por las víctimas de esta tragedia histórica”, explicó Claudio Martínez Cerda, director regional de Patrimonio Cultural de Ñuble.
Por su parte, el historiador Marcial Pedrero Leal, director del Instituto O’Higginiano filial Ñuble, detalló la solución para el “problema”. “Proponemos que se considere el nombre de Fray Francisco Ramírez, quien fue director del Colegio de Naturales de Chillán y maestro de Bernardo O’Higgins. Así, no solo corregimos un error, sino que además rescatamos una figura histórica relevante y edificante para la comunidad”.
Así las cosas, ambas entidades proponen dos alternativas al municipio, la primera de ellas podría ser reponer el nombre completo de Isaías Francisco Ramírez o definitivamente cambiar el nombre por Fray Francisco Ramírez, quien fue una figura clave en el periodo colonial de la ciudad.
La solicitud enfatiza que cualquiera de las dos opciones permitiría “corregir una grave omisión, recuperar el valor del reconocimiento público y proteger la sensibilidad colectiva, especialmente considerando la proximidad de la calle con un hospital”.
Desde las instituciones firmantes expresaron su disposición a colaborar con antecedentes históricos, apoyo técnico y patrimonial para avanzar en el proceso de revisión, subrayando que se trata de “un acto de justicia simbólica y de responsabilidad con la historia local”.
Tragedia
La Discusión consignó los hechos desatados por Francisco Ramírez Ham ampliamente en sus páginas del día 11 de mayo de 1922. La crónica periodística parte advirtiendo sobre el dramatismo del hecho. “Uno de esos dramas que acongojan el alma, de esos que no tienen segundo en la historia, de esos que no es posible que puedan desarrollarse porque se oponen a su consumación todas las leyes que emanan de la divinidad y las humanas leyes, ha tenido lugar ayer, en las márjenes (sic) del Río Ñuble, siendo protagonista un hombre y sus cuatro pequeñas hijas”.
El relato continúa describiendo a Ramírez Ham como exdiputado por la zona y varias veces edil. Recibió de su padre una cuantiosa herencia que incluía varias propiedades y dos molinos, San Pedro y Wicker. Pero con el tiempo, los negocios se apagaron y Ramírez Ham se vio envuelto en una situación económica compleja. El 10 de mayo de ese año 1922, tomó a sus cuatro hijas Margarita y Delfina (gemelas, 10 años), María (7) y Raquel (5) y le pidió a su chofer que los llevara al río Ñuble. La madre de las niñas había muerto algunos años antes. Ya en el río, las invitó a entrar en las aguas y permaneció dentro hasta que las vio desaparecer. Luego salió y con una cortapluma se hizo diversos cortes intentando acabar con su vida, cosa que no logró porque fue encontrado por las autoridades y conducido hasta el Hospital de Chillán. Al ser interrogado, aseguró que su intención era salvar a sus hijas de la miseria. Con los años, Ramírez Ham se estableció en Santiago, se volvió a casar y falleció en los años sesenta.
Fray Francisco Ramírez
En 1786 se reinaugura el Colegio de Naturales de Chillán a cargo de los Franciscanos, con el nombre de “Seminario de Naturales”. Es en este establecimiento donde fue matriculado Bernardo O’Higgins en 1788, siendo sus maestros el rector Fray Francisco Javier Ramírez, O.F.M., los padres Blas Alonso, O.F.M., y Gil Calvo, O.F.M.. El gobernador de Chile, Don Ambrosio O’Higgins, dio su apoyo a este Colegio, estableciendo un reglamento para su funcionamiento.