Por estos días, el patrimonio de Chillán puede recorrerse de una manera completamente nueva: desde un computador o con lentes de realidad virtual. Es el resultado del proyecto “Murales de Chillán desde otras perspectivas”, impulsado por el dibujante técnico y gestor cultural César Pavez, quien acaba de concluir una iniciativa Fondart Regional 2025 dedicada a registrar digitalmente algunos de los murales más representativos de la ciudad.
El trabajo abarca ocho obras emblemáticas que trazan un mapa de identidad artística y social: “Ñuble: Su Naturaleza, el Hombre, su Cultura y los Mitos” y “Quinchamalí: La Persistencia del Mito”, ambos de Hernando León; “Ñuble: Luz, Greda y Canto”, de Alicia Valenzuela; el Mosaico de la Catedral de Chillán, de Alejandro Rubio Dalmati; “Reposo en la Pradera”, de Rafael Correa; “Muerte al Invasor”, de David Alfaro Siqueiros; “De México a Chile”, de Xavier Guerrero y “El Deporte”, de Virginia Bruna Contreras.
“Mi inquietud era difundir, abrir una ventana del arte y el patrimonio de la región. En este caso fueron los murales, pero mi interés es más amplio: el patrimonio en general de Ñuble”, cuenta Pavez desde Yungay, donde reside y desde donde gestó la idea.
El proyecto utiliza una técnica de fotogrametría y modelado 3D que permite obtener representaciones exactas de los murales y sus entornos. Pavez explica que el proceso no se limitó a la fotografía o al registro audiovisual. “Primero realicé el escaneo tridimensional de los murales, lo que me permitió obtener modelos digitales reales. Luego desarrollé la página web www.muralesdechillan.cl, donde cada mural tiene su ficha con información, videos y recorridos virtuales”.
La diferencia, agrega, está en la profundidad del registro. “Con el 3D puedo capturar todos los detalles del lugar. No es una maqueta, sino un modelo real. Si dejaba una mochila en el piso, aparecía también en el modelo. Todo queda registrado tal como es”.
Cada mural cuenta con su descripción, datos técnicos, vistas ortogonales (que permiten conocer las medidas reales y superficies pintadas) y videos 3D en los que el visitante puede desplazarse por el espacio, observando los murales desde ángulos imposibles de lograr en la vida real.
“Por eso el proyecto se llama ‘Desde otras perspectivas’. Las cámaras que uso en el entorno digital pueden situarse en posiciones que no existen en la realidad, dentro de muros o techos. Es una experiencia inmersiva que permite redescubrir el arte mural de Chillán”, explica.
El sitio web también incorpora un mapa interactivo, que georreferencia los murales y permite a los visitantes organizar recorridos turísticos o educativos por la ciudad. “El mapa está incrustado en la página. Uno pincha el mural y aparece la información, la dirección, una foto y el enlace al modelo 3D. La idea es que sea una herramienta viva, tanto para investigadores como para la comunidad”, comenta.
El resultado, según Pavez, es una plataforma digital que combina investigación, arte y educación. “No quise hacer libros impresos, sino material digital, accesible para todos. Quiero que este trabajo sea una puerta abierta al patrimonio de Ñuble y que trascienda las fronteras, porque los modelos 3D pueden verse también con lentes de realidad virtual”, detalla.
Durante la presentación del proyecto en Chillán y Yungay, los asistentes (entre ellos estudiantes) pudieron experimentar esta tecnología. “Cuando los niños se pusieron los lentes y se vieron dentro de los murales de la Escuela México, fue impresionante. Podían caminar dentro del espacio, observar los detalles, y eso genera un vínculo muy potente con el arte”, relata.
