Casi un millar de militares se desplegaron en España, principalmente en la zona de Valencia, junto a bomberos, policías y socorristas, quienes intentan localizar a supervivientes y despejar los numerosos destrozos ocasionados por el temporal.
“Hay muchas personas desaparecidas”, confirmó este jueves a la cadena Telecinco la ministra de Defensa, Margarita Robles. “Sabemos que hay lugares como en Paiporta y en Masanasa donde puede haber personas en los garajes, en los sótanos, gente que fue a recoger los vehículos. Esa es la prioridad en este momento”, agregó.
El último balance comunicado por las autoridades daba cuenta de 95 muertos, 92 de ellos en la Comunidad Valenciana, la región más afectada. Otros dos fallecieron en la vecina Castilla-La Mancha y un tercero en Andalucía.
Esta cifra, la más elevada desde unas inundaciones que dejaron 300 fallecidos en octubre de 1973, “va a aumentar” porque hay todavía “muchos desaparecidos”, según admitió el miércoles el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres.
El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, declaró tres días de luto nacional. En un breve discurso televisado el miércoles, el dirigente socialista aseguró que su gobierno no dejará “solos” a los siniestrados y pidió a los habitantes de la zona estar atentos.
En tanto, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, anunció que el gobierno local prevé aprobar en su reunión del próximo martes un primer decreto de ayudas a los damnificados en la provincia de Valencia, con 250 millones de euros.
Mazón precisó que se tratará de ayudas complementarias a las que ofrezcan otras Administraciones, como el Gobierno de España, y supondrán por ejemplo un mínimo de 6.000 euros por afectado en ayudas “directas, exprés, sin burocracia” para arreglar las casas o comprar muebles.
Según la agencia meteorológica AEMET, en la noche del martes y la madrugada del miércoles varias poblaciones de la región recibieron más de 300 litros de agua por metro cuadrado. El máximo se registró en el pequeño pueblo de Chiva, con 491 litros, el equivalente “a un año de precipitaciones”, precisó.