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Con especial atención los animalistas y las organizaciones de galgos a nivel local han seguido los avances del proyecto que busca prohibir y sancionar las carreras de perros.
El viernes pasado la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa con 7 votos a favor, 4 en contra y una abstenciones, y fue despachado para su discusión en sala.
De esta manera, quienes organicen carreras serán penados con presidio menor en su grado mínimo, es decir, con una condena que podría llegar hasta 540 días, más una multa de 2 a 30 UTM, según informó la Cámara de Diputados en su sitio web.
“Se aprobó en la comisión y estamos muy conformes con eso, pero falta una parte importante de la tramitación y esperamos que la mesa lo ponga en tabla para que se pueda votar en la sala de la Cámara de Diputados”, dijo el presidente de la comisión de Medio Ambiente, Félix González.
En este contexto, los grupos galgueros a nivel nacional encendieron las alarmas y aprensiones respecto al tratamiento de esta iniciativa en la cámara baja, ya que según la organización, se debería haber sometido ese viernes la votación sobre la regulación y no la prohibición.
“El 19 de junio ya se había votado la prohibición y habían perdido ellos por 7 a 4 votos. Lo que pasada es que diputado Vlado Mirosevic reconoció la derrota y pidió para que se cambiara el proyecto de prohibición a regulación y votaron por regular el viernes, per el presidente de la Comisión lo planteó como prohibir”, expuso el vocero Mario Núñez de la Corporación de Galgos de la Región de Ñuble.
Animalistas
El representante de Protección Animal Chillán, Carlos Parra, valoró la iniciativa, ya que siempre será partidario, dice, de erradicar todo tipo de actividad que involucre explotación y maltrato animal.
“No es una casualidad ver tantos galgos abandonados con fracturas, ancianos y hembras galgo, que fueron reproductivas y explotadas, además de encontrar galgos colgados o apuñalados en zonas más rurales. Es un ambiente en que se mueve mucho dinero en apuestas, y donde muchas veces se utilizan medicamentos, viagra y hasta estupefacientes como cocaína liquida con vitaminas que se les inyecta a los galgos antes de las carreras”, sostiene.
Por su parte, la animalista independiente, Helena Valenzuela, quien participa en una red de colaboración animal en Chillán y San Carlos, vive hace tres años en Pemuco y cuenta desde que empezó ayudar conoció el maltrato y abandono que hay en estas comunas.
“El tema de las carreras de galgos es un tema mucho más profundo de que se piensa, ya que no solo está ligado al maltrato y abuso. Este círculo de personas que participan en este tipo de carreras funcionan por sistema de apuestas. Los animales son drogados y explotados, y cuando ya se rinden se abandonan cruelmente, sino son usados como máquinas de reproducción”, explica.
En ese sentido, el representante de los galgos defienden las carreras de perros y advierten que existen regulaciones.
“No hacemos carreras clandestinas, pedimos permisos en la municipalidad y carabineros va a fiscalizar. Además, la Bidema y PDI no encontró maltrato en las carreras y éstas se fiscalizan desde 2015 en adelante. Todos los fines de semana hay alguna carrera en Ñuble, y la mayoría de las veces se corre a beneficio de algún vecino”, dijo.
Agregó que “no podemos correr si nuestro el perro no está “chipeado”, no está inscrito, sino tiene su carnet. En cada jornada de carrera hay un veterinario que revisa a los perros, y ellos se dan cuenta si están con droga”.