Señor Director:
El uso de la IA, en Medicina Veterinaria, ofrece ventajas en rapidez y precisión, pero también plantea riesgos importantes. La IA puede generar errores diagnósticos, si sus bases de datos son limitadas o sesgadas. Carece de la capacidad para interpretar el contexto clínico completo del animal, como antecedentes o factores ambientales. Como docente universitario, detecto que existe peligro de una dependencia excesiva que reduzca el juicio profesional, pues, las fallas técnicas o errores, en la interpretación de resultados, pueden afectar la salud del paciente. Además, la recopilación de datos clínicos plantea riesgos de privacidad y uso indebido. La falta de regulación específica en el ámbito de la Medicina Veterinaria dificulta establecer responsabilidades ante errores. El acceso desigual a estas tecnologías puede aumentar las brechas en la atención animal. En conclusión, la IA debe usarse como herramienta de apoyo y nunca como sustituto del criterio clínico, asegurando supervisión profesional, validación científica y estándares éticos adecuados.
Dr. José Orellana Cárcamo
Médico Veterinario
