Municipalidad de Chillán define subrogancias tras suspensión del alcalde

Luego de conocido el fallo del Tribunal Calificador Electoral (Tricel) que determinó suspender por 30 días de sus funciones, con goce de medio sueldo, en contra del alcalde de Chillán, Camilo Benavente, se espera que para la próxima semana asuman sus interinatos quienes deberán reemplazarlo en lo administrativo y protocolar.
Mientras que la jefatura comunal subrogante quedó a cargo de la abogada y administradora municipal, Roxana Lizama; la administración municipal estará bajo la dirección de Alejandra Martínez, actual directora de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco).
En cuanto a lo protocolar y como cabeza del Concejo Municipal de Chillán, las funciones quedan sobre el concejal Rodrigo Ramírez, por haber sido la primera mayoría en las votaciones pasadas.
Sin embargo, tal suspensión no será inmediata. De hecho, dependerá sustancialmente de que los actuarios del Tricel notifique personalmente al alcalde Benavente en su domicilio, asunto que en otras circunstancias ha demorado varias semanas, incluso meses.
Otra salida que contempla la ley es que el propio alcalde sentenciado se presente en el Tricel para ser notificado, aunque hasta este viernes no había una decisión clara por parte de Benavente, quien comentó respecto al fallo que “es una situación que nos duele, que respetamos y tomamos como aprendizaje. A veces en el afán por sacar proyectos y situaciones adelante, se cometieron desprolijidades que si bien fueron involuntarias, no pueden volver a suceder. Espero que esto no dañe la imagen de transparencia, pues la gente ha visto nuestro trabajo en terreno”.
“Las instituciones funcionan”
Estas denuncias fueron presentadas por parte del equipo edilicio anterior, entre ellas la exconcejala Quenne Aiken, quien apuntó que “esto demuestra que las instituciones sí funcionan y que los concejales han estado cumpliendo su función de fiscalizar. Esperemos que en este segundo periodo del alcalde Benavente acoja el llamado de trabajar con mayor transparencia”.
Una apreciación similar es la del concejal Ramírez, quien asumirá la alcaldía protocolar. “De alguna manera, este fallo consolida la confianza en que las instituciones sí cumplen con sus funciones. Aquí nadie se puede saltar los conductos regulares, y si el Tricel determinó que hubo faltas administrativas es porque más allá de explicaciones o interpretaciones, las hubo”.
Por otro lado, el concejal Iván Badilla, apuntó que “el Tricel vio lo sucedido como algo leve, por eso dieron como sanción 30 días. Hay que analizar bien el fallo porque, en el fondo, hay culpabilidades”.