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Señor Director:
Durante la dictadura, el Poder Judicial rechazó miles de recursos presentados en favor de personas detenidas, torturadas, desaparecidas, relegadas, expulsadas del país, etc. En 1978, el ministro de la Corte Suprema, Israel Bórquez Montero, por preguntas sobre las constantes desapariciones de personas y la negación de los recursos de amparo, dijo: “Los desaparecidos me tienen curco”. En el gobierno cívico-militar, la Corte Suprema dictaminó que el juez René García Villegas, al declarar públicamente que “en Chile se tortura con impunidad”, incurrió una falta contra la disciplina. Por esto, queda suspendido 15 días y recibirá solo la mitad de su sueldo” (1988); después fue exonerado de su cargo. En cónclave de la UDI (abril 2018) el ministro de Justicia, Hernán Larraín, dijo “Si miran y analizan la estructura de los jueces, se van a dar cuenta que la mayoría de los jueces son de izquierda”. Ante esto, el presidente de la Asociación Nacional de Magistrados, Álvaro Flores, calificó como “una agresión directa a la imparcialidad de los jueces”. Ahora, el Senado aprobó la acusación contra Sergio Muñoz Gajardo, ministro de la Corte Suprema, quién investigó múltiples causas de derechos humanos.
Derico Cofré Catri
