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En un evento memorable y marcado también por el duelo nacional por el fallecimiento del expresidente Sebastián Piñera, cientos de chillanejos se congregaron en la Plaza de Armas para ser parte de la inauguración de la escultura Claudio Arrau, obra que rinde homenaje al famoso pianista chillanejo, destacando su invaluable contribución a la cultura y la música nacional.
“Hoy conmemoramos los 121 años de su natalicio de manera especial, inaugurando esta escultura que evoca la imagen realista del pianista ejecutando una obra prima como un noble tributo a su vida artística y como embajador de nuestra tierra”, destacó el alcalde Camilo Benavente.
La ceremonia consideró la presentación de la Big Band Arrau y de los músicos Edith Fischer, Premio a la Música Nacional Presidente de la República en la categoría Música docta 2022 y discípula de Claudio Arrau en Nueva York entre los años 1952 y 1954; el Premio Municipal de Artes infantil Felipe Caro y el tecladista Mathias Encina.
El hijo del pianista, Christopher Arrau, desde Estado Unidos, agradeció a las autoridades de la municipalidad de Chillán por mantener vivo el legado del Premio Nacional de Artes.
“Es un honor ver a mi padre honrado como Chile puede hacerlo. Espero visitar Chillán cuando se cumpla el 35° aniversario de su fallecimiento el año 2026 para destacar su legado, su vida y trayectoria en las artes”, afirmó.
Por su parte, desde Tasmania, la nieta mayor del pianista, Laura Reintsema Brenann, también agradeció a la gente de Chillán y sus autoridades por honrar su memoria.
“Mi abuelo se sentiría extremadamente honrado de ser testigo de la inauguración de esta escultura. Aunque solo he estado dos veces en Chillán en mi vida con mi madre Carmen y mi hermano Carl, la última vez fue con mi esposo Peter y mis hijas en 2011, me hubiese gustado haber estado visitar el teatro donde tocó mi abuelo”, expresó.
En la ceremonia central, el alcalde Camilo Benavente hizo una reseña de la vida de este insigne intérprete de los creadores de la música clásica que lo forjaron como un modelo para los pianistas del mundo.
“Claudio Arrau fue un embajador cultural de Chillán y nuestro país”, señaló el alcalde momentos antes de descubrir la escultura junto a artistas y los integrantes del concejo Municipal.
El jefe comunal también recordó la última visita realizada a Chillán a mediados de los años 80 que tendría un sello distintivo cuando la Universidad de Concepción le otorgó el grado Doctor Honoris Causa y la ciudad entera lo homenajeó un año después de haber obtenido el Premio Nacional de Arte.
Escultura
Para esta nueva conmemoración del natalicio de Arrau, la Municipalidad de Chillán levantó en su honor una escultura en bronce a la cera perdida, emplazada en el eje central, costado sur, de la Plaza de Armas.
El objetivo principal es reconocer al artista valorado internacionalmente a través de una imagen de su rostro ensimismado en la interpretación musical, y en la que sus manos denotan la sutil sensación de tocar una pieza clásica.
La escultura fue diseñada y construida por la escultora Pamela Galleguillos Schiappacasse con vasta experiencia en el país en obras similares.
“Cuando visité el museo pude tocar el piano y pasaron cosas especiales. Hay una conexión emocional con esta obra”, dijo la escultora que también es pianista por esta pieza que evoca una imagen realista del pianista ejecutando una obra prima.
La escultura la complementan los pedales, la lira, el teclado, el panel, la caja sin su parte de fondo. Posee también otra particularidad: un sillín largo, para que el público interactúe con la obra, por ejemplo, sentándose al lado para tomarse fotografías.
