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La Empresa de Ferrocarriles del Estado inició esta semana el proceso de licitación para la compra de seis modernos trenes que operarán en el nuevo servicio Chillán – Alameda, trayecto anunciado por el Presidente Sebastián Piñera el pasado 20 de agosto en Chillán.
El presidente de EFE, Pedro Pablo Errázuriz, informó el inicio del proceso para adquirir las nuevas máquinas. “Estamos muy contentos de cumplir con el anuncio del Presidente Piñera. Hoy partimos con la licitación para la compra de seis modernos trenes que forman parte del proyecto de renovación integral del servicio entre Chillán y Santiago. Se trata de modernos automotores que complementaremos con infraestructura renovada y un modelo de servicio de alto estándar, que lo convertirá en el tren más moderno de Sudamérica”, anunció.
El proyecto contempla la operación de trenes de alto estándar, con una disminución de hasta 2 horas y 40 minutos en los tiempos de viaje, de ida y vuelta, entre ambas capitales regionales.
El trayecto podrá hacerse en 3 horas 40 minutos, en el servicio expreso, y en cuatro horas en el servicio normal.
Con este objetivo considera la utilización de seis trenes tipo BMU híbridos, es decir, que pueden funcionar tanto con alimentación eléctrica -a través de catenaria como los servicios actuales- y con diésel para casos de emergencia, considerando los más altos estándares europeos de control de emisiones.
Los nuevos trenes contarán con cuatro o cinco coches, para una capacidad mínima de 250 pasajeros por tren, que podrá variar dependiendo de los diseños que presenten las empresas que participen del proceso de licitación.
Asimismo, estos equipos deberán alcanzar velocidades de 160 kilómetros por hora, contar con espacios para personas con movilidad reducida, conectividad a bordo a través de wifi, enchufes y puertos USB, circuito cerrado de televisión, climatización, asientos reclinables y porta equipajes.
Mejora en la infraestructura
El proyecto Chillán – Alameda también considera importantes obras de infraestructura asociada, como la automatización de 74 pasos vehiculares y construirá un nuevo confinamiento para garantizar la seguridad de la comunidad y los pasajeros del tren.
La iniciativa implica una inversión de 115 millones de dólares y contemplará dos modalidades: un servicio regular, con detenciones en 12 estaciones y un tiempo de viaje de cuatro horas; y otro expreso, con detenciones en cinco estaciones y solo tres horas y 40 minutos de viaje.