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El pasado 10 de octubre generó conmoción nacional la muerte de un bebé de nueve meses tras ser impactado por una bala perdida mientras dormía en su casa ubicada en la comuna de La Pintana. La situación puso en debate la seguridad en las calles del país.
En Chillán, la noche del martes se registró un caso de bala loca que afortunadamente no tuvo consecuencias mortales. El episodio ocurrió en la Villa Brisas de San Angustín, calle Valle Principal 3255, cerca de las 22:30 horas.
“No sé de donde vino ni nada (la bala), solo sé que me rompió el techo y cayó adentro“, dijo a La Discusión Adela San Martín.
Recuerda que estaba acostada en su dormitorio y escuchó un estruendo fuerte en la sala de estar que está al lado de su habitación. “Era como si hubieran tirado una piedra, voy miro y me doy cuenta que del techo había caído mucho polvo blanco. Llamé a mi hijo y vio que estaba la bala botada“, explicó.
“Me sentí malísimo porque vivo sola, mi esposo hace 5 meses que falleció, y creía que estaban en el entretecho robando pero el impacto fue muy fuerte y me asusté”, agregó.
Posteriormente, la afectada llamó a Carabineros de la Subcomisaría Huambalí para reportar la situación, sin embargo, no quiso presentar una denuncia formal.
“Me tomaron los datos y me preguntaron si quería hacer una denuncia pero qué voy a denunciar si no sé de dónde vino la bala“, expresó San Martín, al tiempo añadió que “carabineros dijo que la bala pudo haber venido de muy lejos porque recorren más de un kilómetro”.
Tras el hecho, el temor y nerviosismo le dificultaron conciliar el sueño solo de pensar que esa bala perdida pudo haberle causado un daño peor. San Martín reitera la necesidad de reforzar la seguridad en las calles de la ciudad. “Pido un poco más de vigilancia“, subrayó.
