Hasta 35 veces detenido por robo de autos ha estado uno los delincuentes habituales que Carabineros ya tiene en su base de datos.
Información que se completa con una nómina cercana a los 30 “fichados” que son los mismos de siempre. Casi la mitad son menores de edad, uno de ellos incluso de 15 años.
Por eso hace no más de un mes se logró recuperar un vehículo solo porque un funcionario de la nueva Sección de Encargo y Búsqueda de Vehículos (SEVB) de Carabineros, sencillamente lo vio pasar a bordo de un Nissan V16, vehículo por el que, conforme a su historial, tenía una marcada predilección.
“El auto ni siquiera tenía orden de encargo, ni tampoco iba haciendo nada sospechoso. Lo detuvimos porque lo reconocimos”, explica el capitán Iván Rebolledo, jefe de la unidad especializada que hizo su debut en la región en diciembre de 2022.
“Como él nos conocía también, no opuso resistencia ni nada de eso. Entonces buscamos la documentación del vehículo, dimos con la identidad del dueño, conseguimos ubicarlo y cuando lo contactamos, nos dijo que ni siquiera se había dado cuenta que le habían robado el auto”, añadió.
No se le puede culpar, quizás. Después de todo, procedió como lo hace la enorme mayoría de los chillanejos que por diversos motivos vienen en sus vehículos hasta el centro de la ciudad, durante la mañana, y lo dejó estacionado en un lugar con alto tráfico peatonal y vehicular, y cuya ubicación es posible de monitorear por las decenas de cámaras de televigilancia instaladas en Chillán.
“La mayoría, hablamos de sobre un 75% u 80% de los robos de autos, ocurren dentro de las cuatro avenidas y, de ellos, la mayoría ocurren en horarios laborales. No es como muchas personas creen, que se los roban de noche y desde lugares más bien despoblados”, advierte el capitán.
Pero si estos robos no resultan llamativos ni para otros peatones, ni para los conductores, ni para el personal municipal a cargo de monitorear las cámaras de televigilancia es porque “estos delincuentes se han especializado en este tipo de robos, entonces son capaces de abrir una puerta en menos de 30 segundos, y en menos de 30 segundos los pueden hacer partir, por lo que ante el resto, es como si el mismo dueño del vehículo lo hubiese abierto y hecho partir”, complementa.
Solo se requiere de una ganzúa, la aplicación de los rudimentos aprendidos y algo de práctica.
De hecho, cuando el dueño del V16 fue a retirar su auto a dependencias de la SEVB, en calle Huambalí, con una ganzúa, le explicaron cómo había procedido el autor del robo.
“Chuta, ya. Voy a comprar un trabavolante”, les dijo. Por nimio que pareciera el comentario, en realidad, las investigaciones realizadas por la SEVB, unidad a la que además se les exige la realización de diversos peritajes, dan a entender que una medida así de sencilla puede ser una solución efectiva.
“Al menos acá en Chillán”, destacan.
En Chillán, a diferencia de ciudades como Santiago, Concepción, Viña del Mar y otras comunas más grandes, el parque automotor de lujo es casi anecdotario, por lo que la presencia de bandas especializadas, dedicadas a las encerronas o a los portonazos es baja y generalmente son practicadas por delincuentes que recorren el país entero en busca de algunos ejemplares específicos.
Ellos están equipados con escáner, clonadores de señal y tecnologías similares. No usan ganzúas.
Las víctimas ñublensinas, en consecuencia, suelen ser “dueños de vehículos más bien antiguos, es decir, de hasta el 2000 o el 2005 y que no cuentan con mayores sistemas de seguridad, ya que son muy fáciles de abrir. En cambio, los portonazos, que uno ve generalmente en televisión, son por autos de una gama media alta a alta, que ellos ni pueden abrir ni pueden hacer partir, por lo que esperan que los dueños lo hagan para robárselos usando la intimidación o la violencia”, detalló.
Dentro de los marcas y modelos más robados en la Región de Ñuble están el Nissan V16, Hyundai Accent (antes del 2000), el Toyota Tercel, las camionetas Chevrolet Luv, y en el caso de las SUV, destacan las Hyundai Tucson y otros todo terreno de tecnología anterior al 2008 en materia de seguridad.
“El delincuente, como toda persona, busca lo más fácil. Si ve un vehículo con trabavolante, con un trabaruedas o con cualquier otro elemento de seguridad, es probable que ni siquiera intente robárselo, porque también saben que acá la gente sigue siendo aún muy descuidada, por lo que siempre se va a encontrar con algo fácil, como autos abiertos, gente que los deja andando mientras se bajan a hacer alguna cosa, como abrir el portón de la casa, por ejemplo, o bien autos estacionados en la vía pública con las llaves puestas”, comentó el jefe de la SEVB.
Tras haber recuperado en estos primeros nueve meses de instalados en la región 415 vehículos (con encargo por robo en la zona y otras regiones) y entrevistar a sus dueños, concluyen que las causas de las sustracciones son “la constante es que la falta de seguridad con que están equipados los vehículos y el descuido de sus dueños, que en cierto modo, se han transformado en los principales facilitadores de este tipo de delitos”.
“Herramientas del Siglo XXI”
Es claro que con la llegada de la SEVB no basta. Menos cuando se sabe que el parque automotriz de Chillán -que es donde se concentra el 64,2% de los casos- ya se estima en uno cada cuatro personas.
Si se atiende además a cifras oficiales de Carabineros que muestran que mientras entre enero y septiembre de 2019 se registraron 148 denuncias por robo de vehículos, en ese mismo periodo de 2022 fueron 389, es que las autoridades regionales han buscado, desde la tecnología, ayudar a las policías a buscar vehículos robados.
La primera novedad anunciada vino por parte de la Municipalidad de Chillán, quienes informaron la instalación de tres cámaras lectoras de patentes, en los dos pórticos de acceso en la entrada norte de la comuna, uno de ellos en el peaje, y más otro en la salida surponiente, por calle Sepúlveda Bustos.
La propuesta fue elaborada por la Dirección de Seguridad Pública y cuenta con fondos de la Subsecretaría de Prevención del Delito del Ministerio del Interior, y los lugares en que se instalarán fueron determinados por Carabineros conforme a las estadísticas delictuales que manejan sus unidades de análisis.
Respecto a los costos asociados al proyecto, desde la municipalidad comentaron que ambos portales significarán un monto global de $65 millones que se enmarcan en el Programa “Sistema Nacional de Seguridad Municipal 2023”.
El presupuesto considera la adquisición, instalación y conexión de un sistema de CTV con los que se controlarán ambos portales de la ciudad.
De esta manera, estos pórticos, tendrán conexión en tiempo real con la actual central de monitoreo de cámaras, ubicada en la Segunda Comisaría de Carabineros de Chillán, donde recibirán una alerta instantánea cada vez que el dispositivo detecte el cruce de un auto por el que haya una denuncia y encargo por robo.
Las patentes, subrayó el alcalde Camilo Benavente, “se detectan a través de las cámaras, con un software de lectura especial para ello. El proyecto incluye sistema de cámaras, radar, licencia de software, servidores, transmisión de obras, instalación y puesta en marcha. Se adquirirá mediante licitación pública, para su instalación durante 2024”.
La última innovación, en tanto, llega como una aporte desde la Asociación de Aseguradoras de Chile, y se anunció el jueves de la semana pasada y que es la aplicación Safe by Wolf para los celulares de los inspectores municipales, que permiten detectar patentes de autos con encargo por robo, emitiendo una alerta cuando el reconocimiento resulte positivo.
El representante de la Asociación de Aseguradora, Diego Rojas, destacó que la aplicación que trabaja con inteligencia artificial, significa “entregarle a la comuna herramientas del Siglo XXI para combatir el robo de vehículos y los delitos de clonaciones de patentes”.
Rojas, estadísticas en mano, explicó que esta aplicación, que ya se está utilizando en otras 154 comunas del país, ha permitido la recuperación de más de 250 vehículos este año.
La directora de Seguridad e Inspección Municipal, Alejandra Martínez, subrayó que “los dispositivos estarán asociados a personal de seguridad que patrullará sectores de la ciudad con mayor ocurrencia de robos de vehículos”.
Los funcionarios municipales, también utilizarán la plataforma www.autoseguro.gob.cl para complementar la acción de búsqueda de este tipo de delito o el contacto a través de la Central de Comunicaciones de Carabineros (Cenco) para la revisión de patentes”.
Alejandra Martínez agregó que “la aplicación móvil detecta si es que hay patente clonada, si es que tiene algún encargo a nivel local o nacional y le llega a nuestra central como alerta y nosotros hacemos el contacto con Carabineros”.
Para las comunas menos urbanas de Ñuble, en tanto, no hay mayores novedades. No es de extrañar, si se considera que salvo Chillán, Chillán Viejo, San Carlos, Quillón, Coelemu, Quirihue y Yungay, el resto registra menos de un 1% de los casos históricos.
De todas formas, la SEVB tiene un alcance operativo regional y desde ya hace un mes se ha ido notado una baja cercana al 3%, lo que en la unidad se interpreta como una “tendencia”.
No grabe sus patentes, aún
Otra de las estrategias que adoptó el Gobierno para desincentivar el robo de automóviles es el de grabar los números de las placas patentes en los vidrios del vehículo.
Curiosamente, desde el mismo Gobierno ha habido personeros llamando a realizar esta práctica, pese a que el reglamento aún no está terminado, por lo que no se ha especificado si el grabado debe ser con cuarzo, ácido, un tallado con dremel; ni la tipografía, tamaño ni en qué parte específica del vidrio se debe inscribir la numeración.
Pese a eso, ya hay personas que lo están haciendo (incluso con resultados desastrosos) “y también hay delincuentes que, por redes sociales, ofrecen servicios para borrar los grabados de los vidrios”, explica el abogado penalista, Rodrigo Vera Lama, quien advierte que esta nueva práctica será recién obligatoria cuando entre en vigencia el reglamento (no la ley) el próximo 11 de marzo de 2024.
Además, entrado en vigencia el reglamento, los autos nuevos tendrán un plazo de cuatro meses para ponerse al día con este mandato, mientras que para los autos usados el plazo será de un año (11 de marzo de 2025).
Este reglamento ya existe en países como Argentina, cuya Ley 14.497 exige la realización de un grabado en el capó, portamaletas, en la máscara y las cuatro puertas, y si son dos puertas la patente será grabada además en el portalón.
