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Señor Director:
Este jueves, la Academia Sueca anunciará al nuevo ganador del Premio Nobel de Literatura, y por segundo año consecutivo, Raúl Zurita aparece como un candidato natural y favorito para este galardón.
Sin embargo, las posibilidades de que lo obtenga son escasas, dado el peso de la geopolítica en las decisiones de la Academia.
En momentos en que Chile parece dirigirse hacia el despeñadero —con el desprestigio del sistema de justicia, el inmovilismo económico y la fragmentación política—, Zurita, desde su arte, nos eleva y nos recuerda que aún tenemos un lugar en la cultura mundial.
Volver a uno de nuestros últimos grandes poetas podría ser un buen punto de partida. Quizás, en las sinfonías de su obra, podamos redescubrir los ecos de un amor perdido por Chile.
Carlos Opazo
Abogado y académico
