Señor Director :
Escribo esta carta profundamente conmocionada por lo sucedido a una querida chillaneja, madre de familia, que sufrió un asalto extremadamente
violento que le produjo el robo de su vehículo y heridas en su rostro. Creo que ya nuestra ciudad no resiste más delincuencia, y es hora de que las
autoridades, parlamentarios, delegado presidencial, gobernador y alcalde tomen medidas aún más drásticas para que los ciudadanos podamos caminar
tranquilos por las calles sin temor a ser víctimas de delincuentes peligrosos y armados . Ya basta .
María Angélica Suazo M