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Vendimia 2025 en el Valle del Itata trae mejores precios y menor producción

Entre $200 y $270 por el kilo de uva Moscatel de Alejandría están pagando los poderes compradores instalados en el Valle del Itata, según informó Odepa, lo que representa en torno a 70%-90% de alza en comparación con igual fecha de 2024 ($120-$140). Se trata de valores vigentes al 19 de marzo, por lo que se prevé que suban hasta $300 a medida que avance la cosecha, tal como ocurrió el año pasado, cuando la Moscatel cerró la temporada en $180.

Sin embargo, los productores no podrán celebrar, ya que se estima una fuerte baja en los rendimientos debido a diversos factores, tanto climáticos como de manejo. Por otro lado, la producción global del Valle del Itata volverá a caer esta temporada, advirtieron, ya que el número de viñedos que quedará sin cosechar seguirá en aumento, ya sea porque el precio no cubre los costos de producción o porque fueron abandonados.

Se observan menores rendimientos, en mayor o menor medida, dependiendo del nivel de manejo y factores climáticos: la ausencia de lluvias y las altas temperaturas golpearon a todos los viñedos de la zona central del país, un fenómeno del que tomó nota la industria, expuso el enólogo Edgardo Candia, quien asesora a una treintena de productores de la zona.

Conviene recordar, sin embargo, que los precios de la uva vinífera a nivel local son determinados por tres grandes empresas, a partir de sus existencias de vino, del comportamiento del mercado mundial y de las estimaciones de producción a nivel nacional.

Según explicó Candia, “los precios son superiores a los del año pasado, por ejemplo, la uva Moscatel estaba a $180 el año pasado, y ahora está en $280 y podría subir más. El problema es que hay poca uva, los rendimientos, en general, están más bajos en comparación con otros años; ya llevamos dos a tres años con rendimientos más bajos y eso se está viendo en todo el país. Estamos hablando de un 20% a 30% de caída”.

El profesional apuntó como principales factores, a “la sequía, este verano no llovió; el calor, que favorece la deshidratación; y también están las enfermedades, como el oídio; pero también responde al manejo agronómico, porque muchos productores no hicieron manejo, por una cuestión de costos, ya que los insumos y la mano de obra están más caros, entonces, con los precios que están pagando por la uva, hay muchos que no logran cubrir los costos; y esos viñedos terminan abandonados”.

Ese proceso, añadió Candia, se viene observando durante los últimos años, y destacó que algunos productores están arrancando los viñedos, principalmente en el Maule, lo que va reduciendo la superficie plantada de vides.

En materia de precios, el enólogo aclaró que a nivel mundial se viene registrado una caída en la producción en los últimos años, tanto por factores climáticos como enfermedades, “pero eso va de la mano con una menor demanda, porque el mundo está demandando menos vino, hay una tendencia a consumir menos bebidas alcohólicas en general, y eso ha hecho que en varios países estén arrancando viñedos y disminuyendo la producción. Entonces, vemos que el mercado se está regulando”.

Viñateros

Un diagnóstico similar planteó Walter García, presidente de la Asociación de Viñateros del Valle del Itata. “Hay una menor oferta, y eso ya lo sabían los grandes compradores, por lo tanto, hoy tenemos precios que están sobre los del año pasado, por lo menos, un 20% a 30% más”, precisó, al tiempo que estimó que, en promedio, se están pagando $250 por el kilo de Moscatel.

Si bien los poderes compradores abrieron con estos precios la primera semana de marzo, “como es tradicional, se espera que esos valores se incrementen en las próximas semanas”, añadió.

El dirigente acotó que, en el caso de la uva País, los precios rondan los $130-$150 por kilo, lo que también representa un aumento respecto a 2024.

A pesar de lo anterior, subrayó que no son precios para celebrar. “Usted puede tener un mejor precio, pero si durante todo el verano no hemos tenido agua, eso significa menores rendimientos, entonces, una hectárea de viñedo que normalmente producía entre 8 mil y 10 mil kilos, hoy está produciendo 6 mil a 7 mil. Al final, es una ecuación que yo creo que está muy bien calculada por parte de la industria también”, declaró García.

Por otro lado, manifestó que en el Valle del Itata conviven distintas realidades productivas, con viñedos más productivos que otros, con diferentes manejos, lo que también determina los rendimientos. Asimismo, reconoció que “todos los años tenemos viñedos que se están dejando de cultivar, por distintas razones, por ejemplo, por un tema generacional, y eso es un fenómeno que va a seguir en aumento, es decir, la superficie va a continuar disminuyendo”.

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