Señor Director:
En días de celebraciones, cuando la población suele comer mucho y mezclar alimentos, aumenta el consumo de antiácidos. Su uso se recomienda particularmente para el manejo de los síntomas de acidez estomacal. Sin embargo, su empleo debe ser de manera ocasional, no de forma reiterada, ya que si una persona presenta molestias persistentes lo aconsejable es que consulte a su médico ante la posibilidad de padecer alguna patología que requiera un tratamiento más específico.
En el mercado farmacéutico local, hay distintos medicamentos antiácidos, de diversas marcas, los cuales pueden contener como principio activo magaldrato, hidróxido de aluminio, hidróxido de magnesio, bicarbonato de sodio o carbonato de calcio. En general, los antiácidos resultan ser bien tolerados por quienes los utilizan. Los efectos adversos que pueden ocasionar van a depender del fármaco y entre estos se pudiesen encontrar náuseas, eructos e inclusive alteraciones de la motilidad intestinal como diarrea o estreñimiento.
Aunque el uso de estos medicamentos resulta ser bastante seguro en un gran número de personas, se debe tener precaución especialmente en pacientes que padecen insuficiencia renal. La dosis varía en función del principio activo, por lo cual es importante revisar la información contenida en el folleto que se encuentra al interior del envase.
Arnoldo Miranda Tassara
Secretario de Estudios de Química y Farmacia USS
