Señor Director:
Al revisar medios de comunicación, redes sociales, intervenciones de políticos, observo un ritmo acelerado y una carrera del hacer porque es “urgente”. Estamos viviendo cargados de urgencias; todo es “para ayer”.
Por eso, me cuestiono el valor que tiene comenzar a reflexionar respecto de lo que es importante para cada uno -y la sociedad- más allá de lo urgente. Para poner el foco en lo importante, necesitamos distinguir entre lo que sirve o perjudica. ¿Cuánto podría impactar en nuestro bienestar si todos -políticos, empresarios, empleados, estudiantes- nos detenemos a reflexionar sobre esto?
Nitza Sánchez
Socia de Dinámicas Humanas