Dos son los objetivos que perseguirán las primarias convencionales del pacto Unidad Constituyente que se realizarán definitivamente el próximo domingo 20 de diciembre en Chillán: legitimar al triunfador como la carta única del bloque (que integran el PPD, PS, DC, PR, PRO y Ciudadanos), dándole así mayor fuerza y unidad a una candidatura que pretende terminar con más de doce años de liderazgo de la derecha; y terminar con la vieja práctica centralista de designar a los candidatos desde una oficina en Santiago, precisamente uno de los cuestionamientos que se ha hecho a la clase política desde hace años, y que el movimiento social del 18 de octubre de 2019 enarboló con mayor fuerza aún.
Si bien nadie espera que la ciudadanía concurra en masa a votar (basta ver las cifras de las pasadas primarias legales para gobernadores regionales del pacto, que en Ñuble solo congregaron a un 2,5% de los votantes, y en Chillán, a 3.500 personas); el sector “concertacionista” de la oposición apuesta porque este ejercicio de transparencia y participación logre aquietar las diferencias internas entre liderazgos. Por lo menos así sucedió tras la elección de Óscar Crisóstomo como candidato a gobernador regional, ya que tras ganar, el socialista recibió el respaldo desde el senador, Felipe Harboe (PPD), hasta el diputado, Jorge Sabag (DC).
Características del proceso
Mañana jueves debiera conformarse un tribunal calificador de elecciones integrado por representantes de las cuatro candidaturas: Camilo Benavente (PPD), Carlos Arzola (ind.), Claudio Martínez (PS) y César Riquelme (PR).
En los próximos días se informará del local o locales de votación establecidos para este fin, y dónde le corresponderá sufragar a cada persona.
Podrán votar todos los militantes de los partidos políticos del pacto Unidad Constituyente, además de todos los independientes.
Para sufragar, solo se necesitará contar con carnet de identidad, mascarilla y lápiz pasta azul. No se requerirá de un permiso especial, aunque Chillán continúe en fase 2, y por ende, en cuarentena dicho fin de semana.
El horario de votación será desde las 9 hasta las 18 horas, y si bien no se trata de un proceso legal, contará con supervisión del Servicio Electoral y de Carabineros.
¿Debate ad portas?
Luego que se confirmaran las primarias convencionales, el precandidato independiente, Carlos Arzola, llamó a sus pares a sumarse a un debate.
“No podemos invitar a la ciudadanía a votar sin información y sin que nos conozcan a nosotros y nuestros proyectos. La gente tiene derecho a saber qué es lo que hará el candidato que consiga la mayoría en la consulta”, aseguró el abogado, quien recalcó que “hoy existen todos los medios y plataformas para poder congregar a los vecinos interesados en conocer nuestras propuestas y, como candidatos, nuestra obligación es responder dudas, conocer planteamientos y, por sobre todo, escuchar”, aseveró el postulante apoyado por la DC, el PRO, y fuera del pacto, por la Federación Regionalista Verde Social.
La invitación realizada por el exgobernador de Ñuble fue bien recibida por el periodista y exconcejal de Chillán, Camilo Benavente (PPD).
“Todo es factible, es importante conversar sobre los desafíos de Chillán a futuro y para eso siempre estaremos disponibles”, sostuvo el también exdirector regional del IND Biobío.
Respecto de la concreción de las primarias, afirmó que “es una muy buena noticia, en general, todos los candidatos de Unidad Constituyente estábamos de acuerdo con que se realizaran estas primarias, pero cuando se nos planteó que fueran un día lunes, por estar en fase 2, no nos pareció. Sin embargo, el Ministerio del Interior autorizó el proceso para el domingo 20, lo que es muy favorable”, sostuvo Benavente, quien cree que de esta forma de legitimará al candidato único del pacto.
En tanto, el arquitecto socialista y presidente de la agrupación Ñuble Transversal, Claudio Martínez, manifestó que “aunque una primaria no representa una tendencia respecto del resultado final, hoy por hoy es la mejor forma de elegir un candidato, con mayor transparencia, y permite seguir recuperando la confianza en la política”.
Eso sí, advirtió, “el hecho que estemos en pandemia y en fase 2 hace mucho más compleja la campaña. Los medios y las redes sociales pasan a ser el instrumento más eficaz en este escenario. Así también se puede evaluar de mejor manera la capacidad de innovación y de comunicar ideas por parte de los candidatos. Se terminan las prebendas, regalos y otras malas prácticas que han acompañado todas las últimas elecciones. En ese sentido, es una oportunidad, por lo mismo, lo que corresponde es hacer un llamado a que vayan a votar las personas que se interesan de verdad por el destino de Chillán”, afirmó, sumándose también al llamado que hizo Carlos Arzola de debatir.
De la misma idea es el radical, profesor y exrector del Colegio Concepción, César Riquelme, quien destacó, además, que se hayan confirmado los comicios.
“La presión ciudadana pudo más. Debemos cambiar la ‘dedocracia’ con un lápiz, y desplazar a una élite que ha detentado el poder y que tiene sumergida a nuestra comuna en la vulnerabilidad, la cesantía, severos problemas de infraestructura y una profunda desconfianza en las instituciones”, aseveró el precandidato.
