Señor Director:
Es cierto, los resultados del pacto Vamos por Chile no fueron los esperados. Los 37 convencionales elegidos no fueron previstos ni por el más pesimista de los analistas. Sin embargo, este desenlace no puede desmoralizar a la derecha. Vamos por Chile no deja de ser el conglomerado más grande de la Convención. Si los 37 son capaces de mantenerse unidos, mayores serán las posibilidades de influir en los contenidos de la nueva Constitución. Es mucho más fácil negociar con un grupo de 37 convencionales que hacer lo mismo con 37 independientes con agendas propias.
Si los convencionales de derecha son capaces de entender que la única forma que tienen para influir en la Convención Constitucional es hacerlo unidos; entenderán que 37 convencionales no son tan pocos en un escenario tan complejo como el actual.
Juan L. Lagos
Fundación para el Progreso