En uno de los mejores partidos que se han visto en la temporada, Ñublense derrotó a Cobreloa por 3 goles a 2.
Intensidad, llegadas en ambos arcos y emoción hasta el pitazo final marcaron el triunfo rojo que realizó una de sus mejores presentaciones del año y sumó tres puntos importantísimos para comenzar a acercarse a los puestos de liguilla.
Cobreloa llegó como líder exclusivo de la Primera B al Nelson Oyarzún, pero Ñublense estiró la paternidad ante los loínos y se hizo fuerte en su estadio, confirmando que a los naranjas les complica jugar en Chillán, sumando su cuarta derrota consecutiva ante el rojo en condición de visitante.
Jaime García presentó como única novedad el ingreso de Federico Mateos, que volvió a la titularidad tras la lesión que lo alejó tres semanas de las canchas, ingresando por el suspendido Alexander Corro.
Cobreloa apostó a salir a buscar el partido con el objetivo de continuar como puntero del torneo. La escuadra de Víctor Rivero presionó constantemente la salida de Ñublense y jugó con sus líneas adelantadas.
Ñublense respondió con un buen juego y mucho toque en el mediocampo, destacando la labor de la dupla compuesta por Jorge Orellana y Federico Mateos, quienes asistieron a todos sus compañeros para darle una salida limpia a Ñublense y colaborar en labores ofensivas.
Tras aproximaciones de ambos equipos, la apertura de la cuenta llegó a los 18 minutos, cuando Johan Moreno capturó un rebote a la entrada del área tras un tiro de esquina, y clavó un derechazo que se desvío en David Escalante para superar a González.
Apenas cinco minutos después del 1 a 0, Ñublense volvió a anotar mediante Sebastián Pérez, quien tras una buena jugada personal dejó atrás a su marcador y definió de derecha para superar a González y poner el 2 a 0.
Ñublense jugaba uno de sus mejores partidos en condición de local y no dejaba reaccionar a Cobreloa. Los Rojos estuvieron más cerca de convertir el tercero que los loínos de descontar en el resto de la primera parte.
En la segunda mitad, Víctor Rivero apostó por Axl Ríos por un bajo Guillermo Firpo y el cambio le entregó mayor dinamismo al juego de los calameños que se adueñaron de la posición, pero dejaron espacios para el contragolpe que Ñublense no supo aprovechar.
A los 62 minutos, Ignacio Jara descontó mediante lanzamiento penal tras infracción de Nicolás Vargas.
Ñublense respondió cinco minutos después gracias a su goleador Mathias Pinto, que puso el 3 a 1 tras recibir una magistral asistencia de Escalante para definir con elegancia por sobre el meta rival.
Cobreloa nuevamente fue en busca del descuento, pero la defensa roja se paró con firmeza, y también tuvo la figura de Sebastián Contreras que estuvo notable para ahogar el grito de gol naranja en dos oportunidades.
A 15 minutos del final, una desinteligencia en la defensa Roja permitió nuevamente a Jara descontar y poner la incertidumbre para los minutos finales.
Los últimos minutos mostraron a un Cobreloa desesperado en busca del empate. El equipo de Víctor Rivero buscó la igualdad con más ganas que fútbol, pero Ñublense se defendió con dientes apretados y García reforzó el fondo con el argentino Molina para los minutos finales.
Ñublense se defendió con todo e incluso pudo aumentar de contragolpe. Los jugadores se pusieron el overol y colaboraron para mantener la ventaja que a la postre fue definitiva y desató una fiesta en el Nelson Oyarzún tras el pitazo final de Piero Maza.
Los cerca de 5 mil hinchas Rojos se fueron felices con una nueva victoria que permite ilusionarse con la Liguilla.
