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Fue un año durísimo para Tomás Barrios (154º ATP).
El tenista chillanejo tuvo altos y bajos esta temporada, pero logró sellarla de la mejor manera.
Levantando la Copa Chile del torneo Gobierno de Santiago 2024, con el apoyo del público chileno.
El “Gigante de Ñuble” se impuso en la final por un claro 6/2 y 6/1 a Nicolás Villalón en el Club de Tenis Providencia.
“Feliz de haber ganado, de jugar en el club en que entreno hace muchos años. Es un torneo muy lindo, no se hace en muchas partes del mundo. No es fácil juntar a muchos chilenos en un mismo torneo. Contento de haber ganado”, confesó tras un irregular 2024 en que pudo jugar tres finales a nivel Challenger, pero sin despuntar mayormente a nivel ATP.
“Fue un año complicado, pero creo que lo terminé de buena forma, físicamente muy bien. Eso me da mucha esperanza y ganas de que empiece el año. Estoy entrenando bastante bien, como hace mucho no podía. Feliz de cómo terminé jugando y físicamente”, valoró el espigado tenista de Chillán, quien espera tener una mejor temporada el 2025, que ya proyecta en su planificación.
“La primera meta es volver al top 100 y después tengo ganas de un poquito más. Quiero seguir jugando y disfrutando del tenis”, dijo Tomás Barrios, ya pensando en la disputa de la fase previa del Abierto de Australia, que se realizará del 6 al 11 de enero.
“Una vez ya pasé la qualy. Las condiciones me ayudan, la cancha es rápida, pero se juega con unas pelotas que no lo hacen tanto. Ahí me adapto bastante bien”, recalcó el chillanejo, también pensando en la visita a Bélgica por Copa Davis.
“Queríamos jugar de local, sobre todo por la gira sudamericana, pero tenemos un equipazo y daremos lo que podamos”, concluyó Tomás Barrios.
El año pasado el tenista de Chillán estrenó su condición de top 100 con una dura caída en la primera ronda de las clasificaciones del Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada.
En su última incursión se inclinó por 6-3 y 7-5 (8) ante el joven francés de 20 años Giovanni Mpatshi Perricard (201°) para decir adiós a la posibilidad de jugar en el cuadro principal de Melbourne. Este año quiere cambiar la historia.
