Ñublense sumará su tercer día de pretemporada en Paso Alejo con tres “retornados” que estuvieron a préstamo: Los delanteros Sebastián Pérez y Wladimir Acuña y el volante Iván Rozas.
Sin embargo, también incorporó tres refuerzos que llegan con hambre: El extremo derecho Felipe Reynero (32), el defensor venezolano, ex U. de Chile, Luis del Pino Mago (27) y el centrodelantero argentino ex Palestino Juan Sánchez Sotelo (34).
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Uno que ya está en Chillán entrenando es Felipe Reynero. El atacante confiesa que aceptó venir porque le atrajo el proyecto que incluye jugar la primera fase de la Copa Sudamericana y porque su familia da vida a un clan cuyo apellido tiene historia en Chillán.
“Me gustan los desafíos. Había completado varias temporadas en El Salvador. Además, tengo a toda mi familia por parte de mi papá allá. Tengo mi negocio allá camino a Las Termas (complejo de cabañas) y eso es un plus que se ganó para irme a Chillán”.
Futbolista y empresario
Felipe ha sabido combinar su vida de futbolista profesional con la de empresario turístico. Tiene un complejo de cabañas en el km 62 antes de Las Trancas, que administra su padre, Roberto Reynero, ex jugador de la U. de Chile y Deportes Temuco.
“Tenemos clientes que van todos los años y tuve la experiencia de mi padre que fue jugador, ganó dinero, pero no lo supo invertir bien. Él me aconsejó mucho, porque la carrera es corta y uno ha tratado de invertir lo que más se pueda”.
Sobre su desafío, recalca que “espero adaptarme lo más rápido posible a la idea del profesor. Rendir de la mejor manera posible. Yo sé que la gente tiene expectativas por lo que me han hecho sentir en las redes sociales”.
La competencia, por un puesto, anticipa será dura.
“Que haya harta competencia es mucho mejor porque suben los rendimientos individuales. Que todos lleguen a sumar, para que al profesor le cueste armar el once”, revela Felipe, quien agrega que su tío Nelson “Mencho” Reynero, pudo ser profesional. “No era bueno para entrenar, me cuenta mi padre”.
¿Y su sello? “Soy un jugador que vengo en alza. Extremo derecho, tengo velocidad, me gusta ganar la espalda de la línea defensiva, con diagonales y espero poder demostrarlo. Si puedo aportar con goles y asistencias mucho mejor”, describe.
“Quedé con una espinita clavada cuando con Cobresal quedamos eliminados con Palestino. Pero el fútbol da revancha y espero clasificar a fase de grupos de la Copa Sudamericana. Me voy a entregar por entero, cumplir las expectativas y dejar a Ñublense en lo más alto”, sentencia.
¿Galani?
En las últimas horas, surgió en la órbita de Ñublense, el nombre de Sebastián Galani, volante de 24 años, quien no renovó en Ñublense. Jaime García no lo tenía inicialmente en carpeta, pero es una carta a analizar.
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