“La contaminación atmosférica, más el coronavirus,generará un problema mayúsculo en salud pública. Las personas que han estado sometidas a elevadas cargas de partículas pueden tener sistema un sistema inmune debilitado”, alertó el académico e investigador Luis Díaz Robles, en momentos en que la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) anuncia planes más estrictos en fiscalización del PPDA en Chillán y Chillán Viejo.
El experto en gestión de la calidad del aire y control de la contaminación atmosférica de la Universidad de Santiago (Usach), planteó que es necesario que en el país se redoblen las medidas para evitar que se generen episodios de alta carga de partículas asociada a la leña, y que además, se identifiquen alternativas menos nocivas de calefacción intradomiciliaria.
El doctor en Ingeniería Ambiental agregó que frente a la pandemia, el Estado debe tomar medidas más duras para evitar que la población se exponga a altos niveles de contaminación atmosférica.
En consonancia con ello, la Superintendencia de Medio Ambiente lanzó un Plan de fiscalización para episodios críticos en el invierno, con fuerte foco en leña y televigilancia.
La entidad expuso que ejercerá desde este año “un importante rol en la Gestión de Episodios Críticos (GEC) al coordinar actividades de fiscalización, verificar el estado de avance de los PDA y sancionar los incumplimientos a las medidas ambientales, más aún en este período de pandemia que podría afectar mayormente a la población vulnerable de las ciudades críticas”.
El superintendente de Medio Ambiente, Cristóbal de la Maza, indicó que la estrategia se focalizará en prohibir la comercializar leña húmeda; obligación de los establecimientos comerciales y de organismos del Estado de recambiar calefactores a leña; restricciones de operaciones de fuentes fijas durante episodios críticos y prohibición de humos visibles en sectores residenciales.
“Esta pandemia del coronavirus obligará a muchas familias que viven entre O’Higgins y Aysén a seguir recluidas en sus hogares durante el invierno. En estas regiones se usa principalmente la leña como calefacción, lo que aumenta la contaminación intradomiciliaria y el riesgo de sufrir enfermedades cardiorrespiratorias. Es por ello que como SMA activamos un plan de fiscalización preventiva para abordar esta emergencia, especialmente la comercialización de leña seca. Hacemos un llamado a la comunidad a comprar solo leña seca. Cuidemos nuestra salud, el medio ambiente y el aire que respiran nuestros hijos e hijas”, dijo el superintendente Cristóbal de la Maza.
Autoridad ambiental
En Chillán, el superintendente de Medio Ambiente, Cristian Lineros, precisó que en el marco del Plan de Prevención y Descontaminación Ambiental de Chillán y Chillán Viejo, a la Superintendencia de Medio Ambiente le compete el control de emisiones de las fuentes fijas contaminantes de más de 75 Kwt, verificación de contenidos de humedad en el comercio de leña, uso de calefactores por edificios públicos y verificación del programa de compensación de emisiones”.
La autoridad ambiental explicó que desde el inicio del período gestión de los episodios críticos en la zona, o sea desde el 1º de abril pasado, se han abordado una serie de líneas de trabajo.
Lineros agregó que respecto de fuentes fijas mayores a 75 Kwt, alrededor del 20% se encuentran paralizadas, debido fundamentalmente a las restricciones de cordón sanitario, además se han hecho gestiones para advertir del estado actual de sus instalaciones y el inicio del periodo de fiscalización.
En relación al comercio de leña, agregó el profesional, “se mantiene el catastro actualizado semanalmente de comerciantes de leña y su stock, el que actualmente bordea los 6.650 m3, lo que corresponde al 16% de los vendedores, con algunos problemas en las cadenas de abastecimiento, cosa que se está abordando en una mesa de trabajo ambiental con diversos actores como Medio Ambiente, Municipios, Ejército, Conaf, entre otros”.
Lineros planteó que estudios nacionales e internacionales, advierten del riesgo a la salud derivado del Covid-19 y contaminación ambiental de material particulado, por lo que la Superintendencia despliega desde hace tiempo una estrategia de fiscalización y coordinación con diferentes actores locales.
El alcalde Sergio Zarzar, en tanto, mencionó que el mayor control es necesario “considerando que con la presencia del Covid-19, más la contaminación atmosférica la comunidad puede estar más propensa a sufrir problemas respiratorios graves”.