Silencio de candidatos por la salud mental

Señor Director:
En el Día Mundial de la Salud Mental, resulta inaceptable escuchar a los candidatos presidenciales hablar de futuro mientras guardan silencio ante una crisis que crece frente a nuestros ojos: un país exhausto, sobremedicado y sin acceso digno a atención psicológica ni psiquiátrica. Prometen seguridad, crecimiento y progreso, pero ninguno se atreve a situar la salud mental en el centro del debate. La tratan como si no fuera un asunto de Estado, como si no estuviera directamente vinculada con la productividad, la violencia, el consumo de drogas y la cohesión social que dicen defender.
Quienes aspiran a gobernar deben asumir compromisos concretos y verificables: aumentar sustancialmente la inversión en atención primaria, fortalecer las acciones preventivas, potenciar los dispositivos comunitarios y garantizar cobertura universal en salud mental. No necesitamos más empatía de campaña ni declaraciones de buenas intenciones. La ciudadanía exige decisiones valientes y políticas públicas robustas en una materia que ya no puede seguir esperando.
Felipe Bravo
Académico de la Facultad Psicología Universidad UNIACC