El Ministerio de Obras Públicas (MOP), la Superintendencia de Servicios Sanitarios y las empresas de este sector regulado deberán definir las obras que serán ejecutadas para asegurar el suministro de agua en todas las localidades atendidas en la actualidad por sistemas de abastecimiento y tratamiento de aguas servidas.
El tema fue analizado hoy miércoles por autoridades nacionales y regionales, encabezadas por el ministro de Obras públicas, Alfredo Moreno, quien además anunció una reducción de 1,3% en las cuentas de los clientes de las sanitarias y que comenzará a operar desde septiembre de 2021.
La autoridad estatal mencionó que las nuevas obras están orientadas a dar respuesta a un problema nacional, como es la falta de recurso hídrico y el cambio en las condiciones climáticas que se observan en gran parte del país y que tienen su origen en modificaciones globales.
Moreno indicó que los planes de desarrollo, a cinco años plazo, tienen que definir las inversiones que deberán encarar las sanitarias para mantener el suministro de agua potable en las ciudades y localidades que atienden.
El secretario de Estado detalló que, en términos generales, se esperan plantas de tratamiento, en algunos casos nuevos sondajes, punteras, estanques para aumentar la reserva de agua potable y para evitar eventos de turbiedad.
“De esta forma los sistemas sanitarios urbanos de cada una de estas cuatro regiones quedan en condiciones de poder decir que para la nueva realidad previsible, que es un sequía que nos ha traído este cambio climático, que es una sequía que ha llegado para quedarse, van a quedar en condiciones de operar y brindar los servicios para los cuales están construidos”.
En el caso de Ñuble, se desconoce por el momento las obras que serán ejecutadas como asimismo el monto global de las inversiones que tendrán que enfrentar las empresas.
El superintendente de Servicios Sanitarios (s), Jorge Rivas, remarcó que “todas esas obras se están discutiendo con las empresas sanitarias, para adoptar las mejores soluciones y que den tranquilidad para los próximos años”.
Ciudad versus campo
El ministro reconoció que existe una deuda en el tema de distribución de agua potable con los habitantes que viven en las áreas rurales, respecto de los que habitan en las zonas urbanas atendidas por las sanitarias.
“Las ciudades han respondido bien, la industria sanitaria chilena ha hecho gran inversión, tiene abastecimiento y tratamiento de agua potable, que prácticamente cubre el 100 por ciento de todas las zonas que está bajo su encargo. Esa no es la realidad de los campos, donde los sistema son muy frágiles”, admitió.
Agregó la autoridad que en los territorios rurales existen sistema construidos por el Estado, vecinos o por las municipalidades, donde existen pozos que tienen poca profundidad o que han reducido su producción y se han quedado sin disponibilidad.
Rebaja tarifaria
En cuanto a la rebaja tarifaria, beneficiará a cuatro regiones de la zona centro-sur, desde O’Higgins al Biobío, y favorecerá a cerca de 4 millones de personas. La disminución en las cuentas irá desde un 1,3% a 1,9% en la cuenta del agua.
Este acuerdo tarifario, que beneficiará a cerca de 4 millones de personas, destacó el ministro Alfredo Moreno, “es una buena noticia para las millones de personas que abastecen estas empresas entre las regiones de O’Higgins y Biobío. Estas tarifas van a entrar en aplicación a partir de septiembre del año 2021 y van a estar vigentes por cinco años”.
Por su parte, el superintendente (s) de Servicios Sanitarios, Jorge Rivas, explicó que los procesos de fijación tarifaria se realizan cada cinco años, son eminentemente técnicos, están reglados por la ley que rige los servicios sanitarios y se deben iniciar al menos un año antes de la vigencia de las nuevas tarifas, por lo tanto, en este caso el quinquenio en que van a regir es entre septiembre de 2021 y septiembre de 2026.
“Estamos bastante tranquilos y contentos con el acuerdo alcanzado. Varias de las variables relevantes en el cálculo tarifario van al alza, pero hay una variable que lleva el acuerdo a la baja y tiene relación con las economías de escala. Es decir, como consecuencia del aumento de la población en estas regiones, el volumen de agua que se consume es mayor, lo que lleva a que se puedan prorratear los costos entre más personas, lo que contrarresta el alza de las otras variables. Son muchísimas las localidades que se verán beneficiadas con esta baja tarifaria: en O’Higgins son 36 localidades, en Maule 31, en Ñuble 16 y en Biobío 35”, precisó el titular de la SISS.
El intendente de Ñuble, Martín Arrau, junto con agradecer el trabajo de la SISS, destacó que “en las ciudades las personas abren la llave y, como por arte de magia, sale agua. Nosotros estamos muy conscientes del trabajo que hay detrás de eso, de perforar nuevos pozos, de buscar nuevas fuentes, de hacer plantas de tratamiento, así que una mantención y una leve disminución en las tarifas es muy relevante en este contexto y, además, agradecer el apoyo de la Superintendencia y de las empresas sanitarias en los proyectos nuevos que estamos impulsando en nuestra región, estamos hablando de proyectos en zonas emblemáticas donde queremos avanzar en agua potable y alcantarillado precisamente en zonas urbanas. También en temas tecnológicos, a través de las empresas sanitarias en el último tiempo por el Covid, estamos en Ñuble realizando monitoreo de aguas servidas para detección de coronavirus, en coordinación con universidades y organismos públicos”.