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El técnico de Ñublense, Mario Salas, confirmó que para el último partido del torneo de la fecha, ante Huachipato, este domingo, a mediodía en el estadio CAP de Talcahuano, reservará algunos jugadores pensando en la semifinal de ida del miércoles 13 de noviembre ante Magallanes, que se jugará en el estadio Nelson Oyarzún a las 20.30 horas.
“Es un partido que lo vamos a jugar con la seriedad que corresponde, pero claramente pensando en el partido del miércoles. La verdad es que no quiero que pase eso, que se juegue pensando en la semifinal del miércoles, pero claramente vamos a tomar recaudos pensando en la Copa Chile. Estamos analizamos si juegan todos los titulares o le damos espacio a otros jugadores”, explicó, antes de anticipar el sello de Magallanes.
“Magallanes juega bien. El partido será una llave muy fuerte, hemos tenido experiencias anteriores y ha sido ingrato, adverso, cuando llegue el momento, tomaremos ese partido como una opción importantísima de revancha para nosotros, que queremos mejorar lo que hemos hecho en los últimos tres partidos. No miramos en menos a ningún rival. tenemos que hacer las cosas distintas”, dijo.
Finalmente, reveló que el plantel está consciente de lo que se juega. “Yo creo que los jugadores están conscientes de esta opción. Debemos demostrar el domingo y el miércoles coherencia con nuestra forma de jugar. Va a ser una final. Hay que tratar de jugar bien. Llegan con volumen ofensivo, pero dejan espacios. La llave será difícil. Hay que trabajarla bien”, sentenció el entrenador de los “diablos rojos”.
Si Ñublense supera la llave de semifinales ante Magallanes, jugará la final nacional de Copa Chile el 21 de noviembre en el estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción.
El Rojo no llegaba a una semifinal de la Copa Chile desde 1995, cuando cayó ante la Universidad Católica tras eliminar previamente a Colo Colo.
