El último sistema frontal de fines de junio, que causó estragos en la región a causa de las intensas precipitaciones, motivaron a las autoridades de Itata para sacar lecciones y planificar una mayor coordinación entre los equipos de emergencia de los municipios.
Es así como, invitados por la Onemi y la Gobernación, desarrollaron una mesa de trabajo práctico y evaluación sobre el funcionamiento de los municipios mediante sus jefes de Emergencias y Didecos, y de la mesa técnica provincial, en cuanto al tiempo de respuesta que hubo para atender las necesidades de los vecinos.
“Nos hemos dado cuenta que nos falta cerrar ciertas coordinaciones o ajustar algunos procedimientos para que todo salga aún mejor, más rápido y más eficiente”, sostuvo la gobernadora Rossana Yáñez.
La directora regional de Onemi, Gilda Grandón, explicó que en esta instancia “abordamos el sistema de evaluación de daños y evaluación de necesidades de las familias, que es un trabajo que radica fuertemente en las municipalidades, específicamente en las unidades de Emergencias y Departamento Social, que son los funcionarios que invitamos, y reforzar los procedimientos junto con la seremía de Desarrollo Social que es algo que hacemos continuamente, y esta vez acogimos el llamado que nos hizo la gobernadora de hacerlo ahora aprovechando que salimos de una eventualidad aprovechando esta experiencia para sacar lecciones aprendidas que nos permitan mejorar el accionar en futuros eventos”, precisó.
Víctor Guzmán, encargado de Emergencias de las comuna de Ránquil, señaló que “en esta instancia podemos canalizar más rápido la ayuda, podemos hacer un diagnóstico más acertado y rápido para poder dar una pronta respuesta ante un eventualidad, así que solo agradecer la invitación de la gobernadora y seguiremos trabajando comunicados a través de nuestra mesa técnica”, cerró Guzmán.
