Ni las denuncias sobre presunto cohecho, o las amenazas de muerte hacia algunos parlamentarios detuvieron la sesión de la Cámara de Diputados en la que finalmente se aprobó el proyecto de reforma constitucional que permite sacar hasta un 10% de los fondos previsionales, en el marco del estado de catástorfe.
La jornada, en la que nuevamente el gobierno sufrió un duro revés, estuvo marcada por un debate intenso, y a ratos, plagado de descalificaciones. La legitimidad del sistema de AFP y la necesidad de transitar hacia un nuevo sistema previsional, se entremezcló con el principal objetivo de la iniciativa, entregar una respuesta rápida a la clase media que está sufriendo los embates de la pandemia.
También hubo alusiones directas hacia aquellos parlamentarios oficialistas que en la votación en general dieron su apoyo al proyecto, y a aquellos que se abstuvieron.
Finalmente, el gobierno no logró alinear a sus diputados y no pudo frenar el paso del proyecto a segundo trámite en el Senado: 95 votos a favor (trece de ellos oficialistas, 8 de RN y 5 de la UDI), 36 en contra y 22 abstenciones sellaron una nueva derrota del equipo político de la Moneda, lo que seguramente, traerá consecuencias.
El texto, sin el articulado referente a la creación de un fondo solidario colectivo, el cual no alcanzó el quórum (obtuvo 83 de los 93 votos necesarios), ingresará ahora a la comisión de Constitución del Senado, y luego será votado en general por la sala, donde requiere el voto afirmativo de 26 de los 43 senadores. Si la oposición mantiene el acuerdo alcanzado la semana pasada (previo al anuncio del nuevo paquete de medidas que hizo el gobierno para la clase media, proyecto que ingresó ayer al congreso), ya cuenta con 24.
“Es una puerta que se abre”
Para el mundo social, lo ocurrido ayer en la Cámara de Diputados tiene varias implicancias.
“Como Coordinadora No+AFP valoramos esta iniciativa solo porque estamos en una situación excepcional, crítica, en la que millones de familias la están pasando pésimo. Es una salida, no la mejor, porque la mejor hubiese sido que este gobierno implementara reales beneficios, concretos y suficientes, pero como eso no sucedió, tuvimos que insistir como pueblo en esta propuesta que hizo un grupo de parlamentarios para retirar hasta un 10% de los fondos previsionales”, afirmó la vocera de la Coordinadora No+AFP en Ñuble, María Elena Hellman.
Destacó que la votación de ayer “es una puerta que se abre, lentamente, para modificar de raíz el sistema previsional chileno, que no es tal, es un negocio y está más que claro. Con esto se inicia una ardua lucha en el congreso por un verdadero sistema de seguridad social. Más que nunca hay una posibilidad cierta de cambiar este sistema, que nos permita tener una vejez digna”, aseveró.
Cecilia Henríquez, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Chillán, ve en la aprobación del retiro del 10%, una alternativa más para las familias que están pasando por una crisis económica.
“Por fin se está escuchando la opinión de la ciudadanía, del vecino común y corriente, de la persona que está luchando todos los días con mucho esfuerzo. La pandemia ha perjudicado a mucha gente y a muchas familias, a mucha clase media que no tenía problemas, y en ese contexto, es positivo que se dé esta alternativa. Esperamos, eso sí, que las autoridades no le pongan a esto letra chica”, afirmó.
Respecto de las propuestas del gobierno, Cecilia Henríquez aseveró que ha faltado trabajar en conjunto.
“Ha faltado el trabajo en equipo. Aquí hay una profunda división, muy notoria, que ha perjudicado y que ha hecho al gobierno llegar tarde con la ayuda. Aquí pareciera que los acuerdos son de algunos y no de todos, y el país los somos todos. Lo que esperamos es que las autoridades estén unidas y trabajen en conjunto, pero eso no ha sucedido. Estamos recurriendo a esta última instancia, porque no se ha hecho bien la tarea”, sostuvo la dirigenta, quien recalcó que el dinero se requiere ahora y sin condiciones o requisitos.
“¿Afectará esto las jubilaciones? Quizás sí, pero el chileno sabrá trabajar y compensarlo”, dijo.
“Falta una hoja de ruta”
Desde la Cámara de Comercio de Chillán, existe cautela respecto de la medida aprobada ayer, a la cual aún le restan trámites legislativos.
“Esto tiene varias miradas. Si lo veo desde el punto de vista del comercio, podría decir que es bueno, porque llegarán recursos frescos a las personas que destinarán a fortalecer el comercio local. Sin embargo, todos los expertos dicen que se estaría debilitando el sistema y los ahorrantes verían perjudicados sus retiros futuros. Al mismo tiempo, hay inversiones que tienen que salir a venderse al mercado, y cuando hay mucha oferta, el precio baja. Es decir, perderemos todos”, sostuvo el presidente de la asociación gremial, Alejandro Lama.
Sí destacó la posibilidad que tendrían las personas de elegir entre las propuestas del Ejecutivo y el retiro desde las AFP.
“Al final del día, al parecer serán las personas quienes deberán decidir qué les conviene más y cuáles son sus necesidades reales. Estamos frente a una situación en la que hay mucha gente desesperada que tendrá más soluciones, pero al final del día, aquí nada es gratis, todos deberemos pagar las consecuencias de este gran desembolso”, planteó.
Para Benito Umaña, académico y presidente del capítulo Ñuble de Chile Descentralizado, lo que ocurrió en la Cámara “es una demostración más de la falta de una hoja de ruta en el país, lo que se ve reflejado también en políticas territoriales, regionales y de diversa índole. Está claro que nadie quiere sacar sus fondos desde las AFP y estamos de acuerdo con que las pensiones son bajas y hay que fortalecer el sistema; pero también existe una necesidad urgente derivada de la crisis, se requieren recursos hoy y no mañana, y en eso no ha habido proactividad. Las medidas se han ido adoptando pausadamente, de manera reactiva, y esta falta de mirada a largo plazo, de planificación en el contexto de crisis, nos ha llevado a este tipo de situaciones”, afirmó.
“Triunfo de la democracia”
El senador del PPD, Felipe Harboe, quien adelantó la semana pasada que aprobará la iniciativa en el Senado, pese a que considera que no es la mejor alternativa, sostuvo que “el retiro de los fondos desde las AFP es un clamor popular frente a la desesperación de miles de familias que no tienen cómo pagar sus deudas o alimentar a sus hijos, y el gobierno les ofrece nuevas deudas”.
El parlamentario firmó la semana pasada, junto a otros 23 senadores de oposición e independientes, un acuerdo para apoyar en bloque la iniciativa.
En tanto, el senador de la UDI, Víctor Pérez, quien tenía la esperanza que la votación en particular se revirtiera, adelantó que el debate que se dará en el Senado será “ideológico”.
“No nos cansaremos de decir que esta situación de pandemia que afecta a nuestro país es una situación única, y que debemos seguir trabajando por proteger y dar las herramientas y generar las medidas que sean necesarias para ayudar no sólo a la clase media, sino a los más vulnerables, a las pequeñas y medianas empresas, pero sin caer en el populismo mediático, eso no ayuda ni contribuye en nada”, sostuvo.
Respecto del paquete de medidas para la clase media anunciado por el Presidente Piñera en la antesala de la votación, el diputado de la UDI, Gustavo Sanhueza, expresó que “el Gobierno anunció que espera un trámite legislativo exprés del programa para la clase media, que es totalmente independiente del curso que tome el proyecto de retiro del 10% de los fondos previsionales”.
Añadió que “nosotros esperamos analizar en detalle la propuesta del Gobierno, y si es necesario introducir indicaciones, así lo haremos, por ejemplo, en el rango de quienes obtendrán los beneficios. Nos parece factible que el bono se aplique a rentas más bajas de los $500 mil pesos propuestos, y que se complemente la propuesta con nuevos instrumentos, como un alivio en el copago de los apoderados de colegios particulares subvencionados y en otras medidas para las personas que no han calificado en ninguna de las opciones. Un tema donde también habrá discusión, es en la forma de acceder a los beneficios, que debe ser simple y lo menos restrictiva posible”, adelantó.
De la misma idea es el diputado RN Frank Sauerbaum, quien se abstuvo ayer en la votación por considerar que el gobierno aún no ha recogido la totalidad de las propuestas realizadas por su partido.
Una de ellas es precisamente entregarle facilidades de pago a los apoderados de colegios subvencionados, materia en la que el legislador ha estado trabajando junto a la diputada Paulina Núñez, con quien presentó una solicitud al gobierno para que se rebajen las mensualidades de los colegios particulares subvencionados.
“El gobierno ha hecho un esfuerzo importante para considerar a la clase media, y esperamos aprobar pronto el proyecto que ingresó al congreso, con algunas modificaciones, como la inclusión de una rebaja en el copago de los colegios subvencionados; o profundizar sobre el bono de $500 mil. Creo que hay que hacer algunas reflexiones, pero claramente ayudará a que la clase media tenga un alivio”, afirmó el legislador.
En tanto, para el diputado independiente Carlos Abel Jarpa, lo sucedido ayer en la Cámara “es un triunfo de la democracia. Ningún conglomerado se puede atribuir este logro; se aprobó transversalmente con votos de parlamentarios de gobierno y de oposición que tienen el deber de ser los representantes de la soberanía popular y que han demostrado que conocen de la indignación social amparada en una Constitución que mantiene una odiosa desigualdad, la cual esperamos cambiar a través de un plebiscito y una convención constituyente”, sostuvo.
Agregó que espera, “por el bien de Chile, que en lugar de presionar a sus parlamentarios, el Presidente logre a través de un dialogo inclusivo en el Senado tramitar esta reforma constitucional, con la finalidad de permitir en el actual estado de emergencia, que las familias que han sido duramente golpeadas por la pandemia puedan optar al retiro de un porcentaje de sus fondos de pensiones. Hoy es el momento de confiar en nuestras instituciones. Es el instante en que debemos mantener la paz social, tal como lo mencionó la presidenta de nuestro Colegio Médico, para superar la actual crisis sanitaria; y es la oportunidad que tenemos para transformar la indignación de las personas en soluciones concretas, que aporten a la estabilidad del país, sobre la base del respeto mutuo”, sentenció.
