Señor Director:
Una vez más, y como si ya fuera un mal chiste repetido, hay algunos honorables del Congreso que se oponen a cualquier tipo de cambio. En este caso, incluso, desde la génesis: una propuesta, porque eso es lo que es hasta ahora, una propuesta de cambio. A esto me refiero al proyecto de la reforma previsional, el que llegó al alma de todos los chilenos. Uno en forma de esperanza y otro como la nueva representación de todos los males que puede tener la sociedad. El asunto es que si en 40 años el sistema de AFP, evidentemente, no funcionó, aquellos defensores acérrimos de este modelo ¿qué favores deben y a quiénes?
Sandra Sandoval