Divididas fueron las opiniones de los legisladores de la región de Ñuble, respecto al proyecto de ley que busca reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas.
La iniciativa, gestada en la bancada del Partido Comunista, se ha enfrentado con la postura del Gobierno que ha rechazado la propuesta afirmando que perjudicará las remuneraciones de los trabajadores.
En esta línea, el senador UDI, Víctor Pérez, afirmó que la idea de reducir la jornada “es sólo una medida efectista, que no tiene aplicación en la realidad”.
El congresista justificó su postura afirmando que “Chile es un país en desarrollo (…) y eso a mi me parece que no es coherente con esa necesidad”.
No obstante, Pérez dijo estar abierto a una discusión pero que debe ser “profunda”.
Una opinión similar entregó el diputado RN, Frank Sauerbaum.
El representante dijo que está por “una reducción de horarios pero con otros ingredientes como la adaptabilidad y la flexibilidad laboral”.
Lo anterior se encuentra en línea con lo que ha dicho el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg.
“El tema no está en reducir la jornada, de hecho, nosotros somos partidarios de reducir la jornada y nuestro proyecto la reduce a un promedio de 41 horas a la semana, pero tiene la posibilidad de que el trabajador o la trabajadora, junto con reducir la jornada, logre adaptar esa jornada de trabajo para que gane días de descanso y para que, además, se adapte la jornada en función de los ciclos productivos de la empresa para que no vea mermada su remuneración”, dijo el secretario de Estado a CNN Chile.
Desde la oposición, la diputada PPD, Loreto Carvajal, manifestó que la propuesta del PC en nada afecta a las Pymes o a las medianas empresas.
“La gente cuando mejora su calidad de vida, se hace más efectiva y productiva. Esta es una definición que merece ser apoyada por el Ejecutivo y que no afecta al desarrollo del país”, dijo.
