A través de una significativa ceremonia, funcionarios de la red asistencial de Ñuble, sellaron con honores su ciclo laboral, luego de décadas al servicio de la salud de las familias de la Región.
En la oportunidad, las personas que trabajaron por 20, 30 e incluso 40 años en los hospitales de la Región, el Cesfam Violeta Parra, el SAMU y la Dirección del Servicio de Salud Ñuble, recibieron el reconocimiento institucional por su esfuerzo, entrega y compromiso con las familias del territorio.
Durante la actividad, el director del Servicio de Salud Ñuble (SSÑ), Ricardo Sánchez, valoró el gran trabajo que por años desempeñaron estos funcionarios: “Como institución, promovemos el reconocimiento a nuestros trabajadores y uno de los momentos más importantes, es cuando las personas concluyen su etapa laboral, luego de tantos años de servicio”.
“Por ello, nos conmueve reconocer y también despedir a nuestros compañeros de trabajo que, con gran vocación de servicio público, dedicaron toda una vida a servir a los demás mediante su labor diaria. Les decimos adiós, con la tristeza de verlos partir, pero también con la alegría de saber que cierran un capítulo importante, en el que vieron concretados sus sueños y anhelos, período que sin duda no estuvo exento de momentos complejos, pero que sabemos que, en la suma y resta, el saldo es siempre positivo. La invitación que hacemos es a cambiar la mirada; verlo como el inicio de una nueva época en la que podrán continuar desarrollándose en lo que se propongan y esperamos haber contribuido en ese enfoque a través del proceso de acompañamiento de la etapa de egreso”, recalcó el directivo.
“Todo ha sido maravilloso”
Mariam Bustos, matrona de la Dirección del Servicio de Salud Ñuble, valoró estos 30 años de trabajo al servicio de la comunidad. La profesional destacó: “Aprendí a trabajar en equipo y comprender que esto se basa en poder escuchar y desarrollar confianzas porque uno tiene que compartir los saberes propios de la profesión y aprender otros, e integrarlos como tal”.
“Uno echa de menos el trabajo, más con la carga laboral que uno tenía, siente que dejó muchas cosas pendientes, pero si uno piensa; siempre quedarán cosas por hacer que otro tiene que tomar con su sello propio. Al principio pensé que me había equivocado en tomar esta decisión, pero con el tiempo me di cuenta que estuvo bien, porque no todo es trabajo… hay que hacer otras cosas, no tanto todavía, pero sí labores, me gustaría viajar y muchas otras cosas”, expresó Mariam.
Carmen Rosa Rubilar trabajó durante casi 40 años en el Servicio de Neonatología del Hospital Clínico Herminda Martín, como Técnico en Enfermería de Nivel Superior (TENS).
“Cuando yo ingresé al Servicio ni siquiera se hablaba de los paños desechables, que era uno de las cosas que usamos a diario y en cada momento. Patologías que también se fueron dejando de lado, pero ahora, gracias a Dios, ha habido demasiados logros”, dijo Carmen.
La funcionaria recalcó: “Para mí significó mucho, logré muchas cosas personales, materiales; tener mi casa propia; darme muchos gustos; tener un vínculo de mucha amistad y compañerismo con todos mis colegas, a mi trabajo le debo todo, me sentía muy en familia, muy acogida, muy feliz llegando a mis turnos. Esta nueva etapa la veo maravillosa, porque he podido organizar mejor mi casa, mis tiempos, que tú te proyectes que este verano puedes salir, no estar sujeto a vacaciones. Todo ha sido maravillo, mi paso por el Hospital y ahora en mi casa, estoy feliz”.
En total, 30 personas participaron de esta ceremonia de reconocimiento, una instancia que buscó destacar su destacada trayectoria en su paso por la red asistencial local.
