Con la firma del acta de entrega de terreno y del Libro de Obras, comenzó la ejecución del proyecto Remodelación de la Plaza de Quirihue.
El proyecto, muy anhelado por toda la comunidad local, esperó por varios años su aprobación, hasta que finalmente, el municipio recibió los recursos.
El alcalde Richard Irribarra recibió al residente de la obra y el inspector de Serviu, con quienes analizó los cambios que traerá este proyecto a la comuna.
“Se está haciendo realidad este anhelo de años. Quizás se generen algunos inconvenientes, pero es parte de los que se necesita para mejorar nuestra plaza y quede lo más hermosa posible. Incluimos baños públicos y un paseo peatonal”, describió el alcalde.
El jefe comunal recordó que “en algún momento fue difícil conseguir el financiamiento, pero con ayuda de algunos amigos, se pudo alcanzar este sueño de quirihuanos y quirihuanas. Esto se suma a nuestro Mercado Municipal, que muchos pensaron que no íbamos a lograr y que hoy son proyectos emblemáticos para la capital provincial de Itata (…) Aún nos queda pendiente el nuevo edificio consistorial que esperamos sacar más adelante”, puntualizó.
Intervención
Para César Cuadra de la Parra, Inspector Técnico Serviu Ñuble, esta obra es significativa. “En lo personal esta obra es muy significativa para mi porque soy de la zona y me acaban de asignar como inspector técnico y espero dar todo lo posible para que esta obra se concrete en los plazos considerados”. Agregó que, junto al director de la obra, Osvaldo Cisterna, inspeccionarán los trabajos casi de forma diaria.
Desde la empresa, Bruno Yubini, residente de la obra, explicó que comenzó la logística que permitirá en los próximos días cerrar todo el perímetro de la Plaza de Armas.
“La calle San Martín también será cerrada completamente para su intervención, porque viene integrado un paseo peatonal en este proyecto. Para las otras calles no vemos necesario el cierre total, y en caso de que sea necesario, lo iremos viendo con el municipio”.
Para tranquilidad de los vecinos, la directora de Obras Municipales, Paulina Belmar, explicó que los árboles prácticamente no serán tocados, salvo los que se encuentran añosos y con riesgo de caída.
“Este proyecto se comenzó a trabajar en 2014. El diseño se hizo desde las necesidades presentadas en ese momento por la comunidad, por lo que la participación de los vecinos fue fundamental”, sostuvo la arquitecta.
El plazo de obra es de 240 días por contrato, a los que debe agregarse el tiempo de revisión técnica, por lo que se espera que la Plaza de Armas esté cerrada al tránsito peatonal por un año.
