Fueron 8 las mujeres que recibieron sus anhelados títulos de dominio en una importante actividad desarrollada en la comuna de Quirihue en el marco de la conmemoración del Mes de la Mujer.
Se trata de beneficiarias del programa de regularización, quienes obtuvieron gratuitamente los documentos que las acreditan como propietarias de sus terrenos, según indicó el Seremi de Bienes Nacionales en Ñuble, Rodrigo Baeza Boyardi.
Según cifras de la Unidad de Regularización de la Secretaría Regional Ministerial de Bienes Nacionales en Ñuble, son 2025 las mujeres que recibieron sus títulos de dominio desde 2018 a la fecha, siendo Chillán (246), Yungay (192) y Quillón (183), las comunas con mayor cantidad de regularizaciones.
“Estos documentos revisten de gran importancia, porque dan seguridad territorial y certeza jurídica respecto a la propiedad de sus terrenos. Además, en el caso de las mujeres tiene también otra connotación para aquellas que se encuentren casadas en el régimen de sociedad conyugal, porque estos inmuebles ingresan directo a su patrimonio propio, no dependiendo la administración de estos al marido”, dijo
Por su parte, la Delegada Presidencial de la Provincia de Itata, Lisette Prado Stuardo, señaló la importancia que tiene para las familias contar con estos documentos.
“Estamos muy comprometidos con seguir trabajando en beneficio de los vecinos y vecinas de la región y por eso valoramos este tipo de iniciativas, en donde, por ejemplo, se logra dar autonomía económica a las mujeres”.
Así mismo, la Seremi de la Mujer y Equidad de Género, Constanza Sánchez Carvajal, destacó el trabajo realizado por los distintos servicios para conmemorar el 8M.
“Hemos participado en diversas actividades enmarcadas en el Mes de la Mujer lo que nos tiene muy contentas como Seremi, porque son muchos los servicios que se han sumado con iniciativas que buscan relevar el rol de la mujer en la sociedad acortando las brechas aún existentes en nuestra región. En este caso, es muy importante lo que se les está entregando a estas mujeres, ya que ellas aun estando casadas en sociedad conyugal, pasan a ser únicas propietarias, no sus maridos. Sin duda es un gran avance que demuestra que de a poco vamos equiparando la cancha”.