Jaime García (41) grita como desaforado en Paso Alejo, encima de la jugada, cerca del jugador, aleonando a sus nuevos dirigidos.
Ya no le queda voz. Tras su segunda práctica al mando del plantel, el nuevo entrenador de Ñublense, ex adiestrador de Santiago Morning y La Serena, llega afónico a la conferencia de prensa, con un marcado histrionismo, mezclado con humor, para expresar una verdadera declaración de principios.
“Yo no les voy a vender nada. Yo soy Jaime García. Armo mis equipos de atrás para adelante, me gusta que mi equipo sea equilibrado porque en esta categoría se pierde por detalles. Soy simple para ver el fútbol”, lanzó de entrada el otrora rústico zaguero central.
Sabe que tiene poco tiempo y que la gente no lo va a esperar. Y que aunque se estrene ante el puntero Wanderers el domingo, “no me interesa, porque le he sacado rendimiento a equipos de bajo presupuesto y plantel corto”.
El sistema y su estilo
Sobre el sistema táctico que utiliza, tampoco fue categórico. “Planifico domingo a domingo. Tengo que transmitir mi estilo, mi agresividad. Quiero un equipo con personalidad. Que juegue, que maneje la emocionalidad del público y la prensa. Puedo jugar con un 4-4-2 o un 4-2-1-3. Soy cercano, afectuoso, es mi forma natural. Pero cuando tengo que ser severo, lo soy, no voy aguantar la joda ni la indisciplina. El que la comete se va”, golpea.
La credibilidad
Para García la clave de su conducción es la credibilidad. “Trato de que el jugador me crea. Quiero que se sienta cómodo, no soy de cambiar, trato de buscar el equipo, haré algunas variantes, pero trato de que caballo que gana repita, pero adecua a las características de mis jugadores”.
“Yo asumo toda la responsabilidad”
El otrora defensor de Arica fue frontal a la hora de asumir la presión que significa tomar las riendas de un equipo en el fondo de la tabla.
“Yo me hago cargo de todo, como si el equipo lo hubiese tomado en enero. Decir que ‘yo no armé el equipo’, no va conmigo, mi responsabilidad es desde enero. Yo no me voy a escudar. Si tomé este club, sé a lo que vengo y ver cómo enfrento a Wanderers, que es el puntero, pero no me importa, porque lo he visto jugar. No ha jugado bien y ha ganado. Ahora viene lo mío”, subraya.
“Me iré sin cobrar un peso”
“La gente no conoce mucho de mí, pero pido que crean en mí, si llego a fallar soy un DT que no les cobraré un peso, eso que quede grabado. Me iría así porque hay una hinchada que sufre, dirigentes que sufren y el periodismo también. Si no me la puedo, vendrá alguien que pueda, pero me voy por la puerta ancha”, enfatiza.
Cavalieri le compartió estadísticas y tips
Jaime García confía en que el equipo le va a responder, pero tiene claro que “el que no mete, no corre, y no tiene sacrificio, no puede jugar en la B”.
Además, reveló que el saliente entrenador, Germán Cavalieri, con quien se reunió ayer, le compartió todas las estadísticas de Ñublense y Wanderers y algunos tips.
“Es una buena persona el ‘Flaco’”, recalcó.
La prensa y “Chiquito” Escalante
También aclaró que su relación con la prensa será abierta. “Porque uno sabe como es esto. Si me critican profesionalmente, bienvenido, porque uno crece, si me preguntan con respeto, yo responderé todo. A veces vienen preguntas fuertes, pero hay que responder. No hay preguntas tontas, solo respuestas hueonas”, bromeó.
Recalcó que tras dos días de trabajo, detectó potencial, que hay un gran grupo humano “cálido y sano”, con el que trabajará la faceta defensiva, las transiciones rápidas y la agresividad para presionar porque le gusta “atacar y defender con equipo compacto, porque en la B te hacen un gol y chao”.
Confiesa que a David Escalante, al que ya dirigió en “Chago” le sacará rendimiento y que si no está en el área cuando llegue un centro “le pegaré un charchazo (jajaja)”. Sobre al final de su presentación, García es sincero y optimista. “No me conoce nadie, estoy haciendo mis primeras armas, pero he cumplido buenas campañas. ¿Serán mis ganas, el ímpetu?, pero en Ñublense quiero compromiso y que me crean”.